Entrevista / Emilio Gamboa Patrón / 'La política no tiene instructivo'
| Autor | Miguel de la Vega |
Si hubiera un catálogo de operadores políticos, Emilio Gamboa Patrón estaría en la portada.
Un dato sirve para ilustrar la capacidad del yucateco para adaptarse a las circunstancias: desde 1978 ha ocupado ininterrumpidamente cargos públicos, ya sea como funcionario gubernamental, senador, diputado o dirigente partidista.
¿Cuál es su secreto? Sus amigos y enemigos le reconocen una minuciosidad casi obsesiva en el manejo de las relaciones políticas como si realmente fueran personales.
El priista acepta la entrevista en episodios, por escrito y por teléfono, antes, durante y después del periodo extraordinario en el que finalmente se aprobaron las leyes reglamentarias de la reforma electoral.
En lo que se refiere a las reformas, ¿quién es el héroe de esta película?
El mérito de haber aprobado reformas tan importantes corresponde a todas las fuerzas políticas. Los beneficios, sin duda alguna, serán para todo el país.
¿Cuándo fue la última vez que pensó en las próximas generaciones al votar una ley?
Un político con vocación siempre piensa y trabaja para las futuras generaciones.
¿De qué decisión política se ha arrepentido?
Es muy importante aprovechar la experiencia positiva de las decisiones que se toman, porque todas, sin excepción, nos ayudan a superarnos como personas y como políticos.
¿De cuál está más orgulloso?
Estoy muy satisfecho de todas las decisiones políticas en las que he participado.
¿Cuál es la regla número uno en política?
Cumplir con la palabra y siempre dialogar.
¿Y la número dos?
Cumplir los acuerdos alcanzados.
¿Más sabe Gamboa por viejo que por Gamboa?
En la política nunca he dejado de aprender.
¿Cuáles son los ingredientes para cocinar un acuerdo político?
La política no se agota en un recetario ni viene con instructivo, pero los ingredientes que siempre están presentes en un acuerdo político son el diálogo, la comunicación franca, el entendimiento, la razón, la voluntad, la palabra, la buena fe y pensando siempre en el país.
¿Qué es lo que nunca debe prometer un político?
Falsedades y compromisos que dañen a la gente.
¿Cuáles son sus principios éticos para hacer política?
La responsabilidad, la disciplina, la honestidad, el respeto y cumplimiento de la ley, así como el servicio a los demás, son algunos de los principios que llevo a la práctica en el servicio público hace ya muchos años.
¿En qué momento se desprestigió tanto la función pública?
Cuando la política se alejó y dejó de cumplirle a la gente. La verdadera...
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