Entrevista / Josefina Tomé / Exilio, semilla en tierra fértil

AutorReforma / Staff

Es hija de exiliados españoles que llegaron al puerto de Veracruz un 7 de julio de 1939. En ese barco, conocido como el Ipanema, viajaron 998 personas que, como sus padres, huían no solo de la dictadura franquista, sino también de un Gobierno francés que recluyó a muchos en campos de concentración. Josefina es la vicepresidenta del Ateneo Español en México, un espacio principalmente de memoria y homenaje de aquel capítulo de la historia.

¿Cree que la sociedad española tiene presente el exilio republicano?

Lo desconocen totalmente. Algunas personas que han visitado el Ateneo en misión diplomática o de viaje de negocios nos dicen que gracias a la visita lo descubren. No conocen el después de la guerra ni por qué ese exilio ha sido tan importante para México.

¿Cómo valora la visita del Presidente español en funciones Pedro Sánchez el pasado 30 de enero?

Valoramos muchísimo que viniese a hacer ese reconocimiento al exilio. Además, no fue su primera visita al Ateneo, ya que vino cuando era secretario general del Partido Socialista Obrero Español y después de renunciar a su escaño de diputado, cuando solo era Pedro Sánchez. También han venido dos ministras y Josep Borrell (Ministro en funciones de Asuntos Exteriores) en un viaje en el que acompañó al Rey Felipe VI.

¿Ha habido un cambio de actitud desde el Gobierno español?

Se han hecho cosas que antes no se hacían y creemos que si este Gobierno continúa se dará algo más de reconocimiento al exilio. Aún así, creo que en España sigue habiendo miedo, lo noto cuando voy. Recuerdo la primera vez que fui cómo mi familia me decía que no hablara tan alto.

¿Cree que la sociedad mexicana tiene presente el exilio?

Totalmente. El exilio español está presente en la vida académica de México. Se crearon editoriales que aún funcionan, escuelas como la de Madrid o el Instituto Luis Vives que aún forman y en las universidades hay salas con nombres de exiliados.

¿Las generaciones de exiliados ya nacidas en México mantienen el vínculo?

No, y es lógico. Yo aún porque soy hija de exiliados y estudié en el Colegio de Madrid, que era como un gueto y la mayoría éramos hijos de exiliados. Pero nuestros hijos saben que vienen del exilio, lo conocen, lo valoran y lo respetan pero su vida ya es diferente. En el Ateneo nos cuesta atraer a jóvenes, aunque a veces logramos organizar actos bonitos con ellos. Por otra parte, estamos trabajando para que los hijos y nietos de los exiliados que hallan en sus casas una gran cantidad...

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