Entrevista / 'No tengo bola de cristal'

AutorMiguel de la Vega

A sus 34 años, Iván Barona se ha convertido en una de las voces más escuchadas en el mundo bursátil. Hay quienes lo consideran un gurú de las inversiones, aunque él rechaza ese término. No obstante, reconoce que le apasiona acertar en sus predicciones, perdón, en sus análisis sobre el comportamiento de las acciones.

Muchos te consideran un gurú bursátil...

¡Yo no tengo bola de cristal! Jajaja. Lo que tengo son 12 años trabajando en GBM viendo temas de inversiones y finanzas.

Pero eres una voz que se hace escuchar entre los inversionistas...

Los inversionistas somos ávidos de información y nos gusta escuchar diferentes opiniones. Creo que es más apasionante encontrar un punto de vista contrario, que encontrar una voz que te diga lo mismo que estás pensando.

Si no tienes bola de cristal, ¿cómo lo haces?

La bola de cristal es hacer la tarea. Esto es, hacernos con la información, procesarla y después ejecutar dentro de nuestro marco de riesgo-rendimiento.

Lo dices como si fuera fácil...

Mira, al momento de comprar una acción lo que estamos haciendo es asociarnos con una empresa. Si estuviéramos comprando acciones de Apple, estaríamos por un momento siendo socios de Tim Cook. Si sabemos lo que estamos comprando, sabemos el riesgo en el que podemos estar incurriendo. La otra parte es la disciplina.

¿A qué te refieres con disciplina?

Aquí somos muy creyentes de la cultura financiera. Creemos que es importante que la gente conozca qué puede hacer con su dinero, cuáles son las oportunidades, los riesgos e, inclusive, el riesgo por omisión, que es el que corres por no hacer algo más por tus ahorros que tanto trabajo te cuestan.

A la hora de invertir, ¿qué papel juega la suerte?

Esto no es de suerte. Queremos erradicar la idea de que esto es un juego o una apuesta.

La empresa que diriges GBMHomeBroker es una plataforma que permite a cualquiera convertirse en operador bursátil. ¿No es un riesgo eso?

De lo que se trata es de dar todas las herramientas para poder tomar decisiones educadas al respecto. A fin de cuentas, el peligro de malas decisiones económicas existe fuera del mercado.

¿A qué te refieres?

A toda la gente que está participando en instituciones no reguladas: ¡eso sí es un riesgo! Como entrar en pirámides o en cuestiones que prometan retornos (ganancias) exorbitantes, fuera de la realidad.

Nadie regala dinero, pero ¿por qué entonces la gente sigue cayendo en este tipo de transas?

La ambición hace una mancuerna con la ingenuidad y te lleva a...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR