Entrevista / Rosana / 'La fragilidad se adueñó del mundo'

AutorMiguel de la Vega

FOTO: ADRIANA GARIBAY

No cualquiera puede presumir haber cantado en vivo ante 100 mil personas. Los Beatles no dieron nunca un concierto de ese tamaño. Rosana, sí.

Y, sin embargo, esta cantante española -de las Islas Canarias, para ser exactos- logra establecer con su público, sean unas docenas en el Lunario, sean miles en un estadio, una conexión más bien íntima.

El pretexto es su nuevo disco, 8 Lunas, sin embargo Rosana le entra a todos los temas: desde tratar de desentrañar el misterio del éxito, hasta la crisis en España, pasando por supuesto por el hecho de que todo el mundo conoce Si tú no estás aquí, pero nadie se sabe la letra.

Tienes otro look: más agresiva, más roquera...

¿Sí? ¡No! ¿O sí?

Sigues entonces en la misma línea.

Soy quien soy.

¿Y quién eres?

Un desastre que adora la música y al ser humano a partes iguales.

Hace 17 años, en tu primera vez en México, no sabías qué hacer con la fama.

Sigo sin saberlo.

Todos los famosos quieren ser anónimos...

Sigo pidiendo lo mismo y sigo queriendo lo mismo y sigo soñando lo mismo.

¿Puedes salir a la calle sin traer una nube de fotógrafos encima?

Sí.

¿Cómo lo logras?

Siendo consciente de que, o lo hacía en aquel momento, o no lo haría nunca.

¿Recuerdas el momento en que decidiste no dejar de lado tu vida personal?

Era Navidad, hace 17 años, y yo tenía que salir a buscar los regalos. Fue en el momento en que estaba en lo más alto de las listas de popularidad. Me negaba a que mi ropa, mis cosas, me las compraran. Y me negaba a dejar de ser parte de la calle.

¿No has sacrificado nada por tu carrera?

No.

¿A poco te importa más tu vida que tu carrera?

Lo que pasa es que yo quiero basar mi carrera en que la gente tenga en cada disco, en cada canción y en cada texto, la verdad de lo que siento y de lo que pienso. Y esa verdad pasa porque el éxito que yo haya tenido, que tengo o que vaya a tener, no sea a cualquier precio. No quiero sacrificar nada y menos sacrificar a las personas.

¿Cuál es la mejor historia que te ha dado alguna de tus canciones?

Saber que mi música se pone en varios, no en uno ni en dos, en varios colegios de niños con autismo. Que mis canciones generan comunicación entre ellos y su familia.

¿Cuál es el efecto de tu música?

No lo sé, pero me encanta que ocurra. Me encanta que, de repente, un niño al que está costándole una conexión con el resto del mundo decida comunicarse a través de algo que yo he hecho: mis canciones.

No me imagino un concierto tuyo en un estadio. Siempre...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR