Escalera al Cielo
| Autor | Sergio González Rodríguez |
Pensar la historia
Frente a cierto marasmo académico -imperante en México- en torno de la reflexión histórica, la revista Historia y Grafía del Departamento de Historia de la Universidad Iberoamericana ofrece uno más de sus extraordinario números, esta vez dedicado a explorar la "función social de la historia", con el que al mismo tiempo celebra sus 10 años de existencia.
Inquietud surgida de la necesidad de evitar el esencialismo atemporal en que se ha entrampado el desarrollo de nuevas perspectivas de estudios históricos, que luego fructificó en un coloquio realizado en dicha universidad en el otoño de 2002, ahora se puede disponer en tal número de la lectura de los textos de tres distinguidos historiadores que allá concurrieron, así como de la discusión que se dio entre ellos (el brasileño Luiz Costa Lima, el alemán Hans Ulrich Gumbrecht y el francés Franìois Hartog) con el director de Historia y Grafía, el mexicano Alfonso Mendiola.
Luiz Costa Lima aborda el problema imperativo de la temporalidad, y de las nociones que intermedian entre ésta y el trabajo del historiador, es decir, la realidad, la causa, la ficción.
A su vez, Hans Ulrich Gumbrecht cuestiona la institución de la "Historia" como un ente en "decadencia" que debe enfrentar un replanteamiento integral y conducirse a fundar un nuevo paradigma de estudio que pugne por la "presentificación" de la historia, una suerte de metamorfosis de la memoria en historia viva, no por necesidad dependiente de los textos que la explican, sino de otros soportes mediáticos, por ejemplo, los museos.
Por último, en el que quizás sea el más propositivo de los textos, Franìois Hartog establece que si a partir de la Revolución francesa el tiempo dominante fue el futuro, en la actualidad se registra una idea hegemónica del tiempo en tanto presente alargado, o mejor aún, "un espacio de experiencia que se ha extendido tanto que casi se ha separado del horizonte de expectativas", un régimen de historicidad al que denomina "presentismo".
El historiador galo se referirá también a esto en términos de aceleración de la historia, de "historización de lo inmediato". Algo muy distinguible, podría añadirse, desde la amplitud e intensidad de las sociedades mediáticas y su plataforma técnica, ubicua, simultaneísta.
El diagnóstico de Franìois Hartog replantea las brillantes propuestas del historiador alemán Reinhart Koselleck, al que los lectores mexicanos pueden acceder ahora por la breve y fundamental obra...
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