Escalera al cielo / El detective negro
| Autor | Sergio González Rodríguez |
A través de su detective africano Touré, Jon Arretxe ha creado uno de los personajes más contundentes y entrañables de la narrativa negra en lengua española de los últimos años.
Bajo una gesta sobre la supervivencia de un inmigrante en Bilbao sin papeles que justifiquen su estancia allá ni un trabajo fijo, las novelas que Arretxe (Basauri, 1963) ha dedicado a Touré representan un logro completo en términos literarios.
Además de cumplir con las exigencias del género, y construir un espacio distintivo entre la numerosa oferta de títulos en torno del detectivismo que cada año se publican en Iberoamérica, Arretxe emplea cada novela para flexibilizar los recursos narrativos y, de acuerdo con la peripecia que encare el protagonista, cada novela podrá asumir una forma y fluidez singulares.
Por ejemplo, en 19 cámaras (Erein, 2012), plantea la vida en el límite de lo absurdo cotidiano de los inmigrantes (sobre todo africanos, pero también chinos, latinoamericanos, gitanos, rumanos, etcétera) en una sociedad bilbaína marcada por los contrastes. En 612 Euros (Erein, 2013), predomina el humor y la picaresca, mientras en Sombras de la nada (Erein, 2014) el relato se torna oscuro al contar la tragedia que asedia la vida de aquéllos. Juegos de cloaca (Traficantes de Sueños, 2015) presenta a Touré en un dramático regreso a su tierra donde se confronta con el afecto al entorno y la amenaza que lo persigue por desafiar el poder criminal.
Escritor excéntrico, en el sentido de ser ajeno a la lucha por los valores y prestigios del mundillo literario, y pertenecer a una cultura marginal, Jon Arretxe ha tenido una formación insólita de carácter humanista (doctor en filología vasca, licenciado en educación física, estudios de canto y piano clásicos), y su pasión por viajar en bicicleta miles de kilómetros lo ha llevado a recorrer Argelia, el desierto del Sahara, Mali, Senegal, Delhi, Pakistán, China, Turquía, Burkina Faso, el Amazonas.
Así, la experiencia profunda del viaje dota sus novelas de un saber especial, apto para el matiz, el giro inteligente, la ruptura de los lugares comunes y el hallazgo de una empatía que transmite a sus personajes: hombres y mujeres empobrecidos que, a pesar de la dureza que padecen a diario, mantienen una dignidad admirable.
Un día Touré inventó que, para ganarse algo de dinero, podría anunciarse en unas tarjetas de presentación como detective, sin tener idea al respecto, además de proponerse, sin serlo tampoco, brujo, adivino o...
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