Escucha con límites

AutorÉdgar Vargas

La música puede motivarte para tener un mejor desempeño durante los entrenamientos, pero podría convertirse en un dolor si abusas de los audífonos.

Si eres de las personas que invariablemente hace ejercicio con los audífonos puestos, debes saber que eso no es muy recomendable, y si no los puedes dejar debes saber que te expones a males auditivos.

Existen en el mercado gran variedad de reproductores portátiles de audio y de auriculares que mucha gente ocupa para hacer ejercicio.

Sin embargo, son pocos los aditamentos creados específicamente para el fin referido, por lo que los expertos recomiendan abstenerse de su uso para evitar infecciones o el aumento en la producción de cerumen, lo que comúnmente se conoce como cerilla.

Según la explicación de los especialistas, los audífonos se colocan, por lo regular, en el conducto auditivo externo que llega al tímpano; al hacer ejercicio se genera calor y humedad en dicho conducto, y con los audífonos crecen bacterias y hongos que producen infecciones en el oído.

Todo inicia con la aparición de la otitis (inflamación del conducto auditivo externo debido a una infección), que de no atenderse a tiempo y seguir usando los audífonos, puede convertirse en aguda o crónica.

Los primeros síntomas son presencia de humedad dentro del conducto auditivo externo, dolor y pérdida de audición. También debes estar alerta de otras molestias, como la sensación de oído tapado o hasta mereos. Ante cualquiera de estas señales, acude con un médico especialista.

Otro ciudado básico de tus oídos es escuchar la música a un nivel adecuado, independientemente de los audífonos que utilices.

Para evitar la pérdida de audición por el alto volumen, debes nivelar tu reproductor entre los 20 y 30...

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