Espectro / Al final...un comienzo
| Autor | Javier Tejado Dondé |
Mayo apunta a ser un parteaguas en la historia de la radio, la televisión y las telecomunicaciones en México. Esto derivado de la aprobación, por el Congreso de la Unión, de las leyes que regulan las actividades de las industrias mencionadas. Pero también por la aprobación de una nueva Ley Federal de Competencia y del nuevo estatuto para la agencia de información, ahora del Estado mexicano, Notimex.
Derivado de la aprobación de las leyes de radiodifusión; y, de telecomunicaciones, la Cofetel se ha convertido en regulador de ambas industrias. El Presidente de la República debe designar a cinco nuevos comisionados a más tardar el día 12 del presente mes, mismos que deberán ser "no objetados" por la Comisión Permanente del Congreso de la Unión. Con ello, se abre una ventana de oportunidad para que finalmente haya comisionados que, con garantía de inamovilidad y nombrados por dos Poderes de la Unión, logren ordenar y avanzar el sector de las comunicaciones electrónicas en México.
Los primeros sondeos sobre los nombramientos los están realizando, conjuntamente, dos funcionarios del primer círculo de "Los Pinos": Emilio Goicoechea y Ramón Muñoz. Hasta ahora las reuniones con las cámaras industriales y varias empresas del sector han arrojado consensos en el perfil y el listado de los aspirantes a la Cofetel. Quizá la única lista que ha sido desechada, es aquella que envió la subsecretaría de comunicaciones de la SCT, que está preocupada por mantener su injerencia en la nueva Cofetel y que a la vez quiere asegurar una "tapadera" sobre las varias irregularidades que se han venido detectando en el sector que coordinaba. Y es que la SCT está teniendo problemas para explicar al Congreso de la Unión, a la Secretaría de la Función Pública y a la Auditoria Superior de la Federación varios movimientos irregulares que hizo con estaciones de radiodifusión, dejando ganancias millonarias a personas discrecionalmente seleccionadas. Investigaciones que surgieron a petición de más de 200 legisladores federales. La SCT también está preocupada por el curso que las auditorías de desempeño vayan a dejar sobre el Sistema Integral de Información en Materia de Telecomunicaciones, SIMAT; y, sobre los varios proyectos de reestructura que se hizo para la Cofetel y la propia subsecretaria de comunicaciones, entre otros asuntos. Estos proyectos comparten asignaciones multimillonarias -más de 40 millones de pesos sin concurso público- y son un completo fracaso.
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