Experiencias con el Presidente: Diario del ex chef de Fox
| Autor | Ángel Rivas |
REFORMA/Enviado
COATZACOALCOS.- Antes del mandato de Vicente Fox, había chefs encargados de los eventos oficiales, sin embargo, tuvo que pasar mucho tiempo antes de que un mexicano estuviera a cargo.
José Bossuet Martínez de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, a sus 27 años de edad puede decir que estuvo casi dos años preparando los alimentos que ofrece el Presidente de México en sus recepciones oficiales.
La salida del chef de la Presidencia este año se debió a fricciones que iniciaron en el 2002 al solicitar Marta Sahagún un menú mexicano -enchiladas potosinas y crepas de cuitlacoche- para la cena con el primer ministro checo Milos Zeman y su esposa. El joven se opuso argumentando que para los europeos orientales el maíz y el cuitlacoche son alimento para animales, y efectivamente no comieron esos platos.
"Aquí en México ser chef del Presidente no es un puesto oficial, en otros países se maneja públicamente y es una labor reconocida, tal es el caso de Estados Unidos, Europa o Perú.
"En México se considera un trabajo importante, al grado que tuve guardias del Estado Mayor que me cuidaban", explica el cocinero, egresado de la Universidad del Claustro de Sor Juana.
Toda una experiencia
"Cuando era pequeño", recuerda, "le comenté a mi abuelita Julia que quería ser chef del Presidente, sin embargo yo esperaba que eso sucediera en el futuro lejano.
"Gracias a unas prácticas de cocina y a una amiga conocí a Frédéric Lejars, chef presidencial en los últimos años de Ernesto Zedillo y en los primeros meses de Vicente Fox. De repente quedó la vacante y una compañera que laboraba en Comunicación Social de Presidencia me recomendó", narra.
En abril del 2001, comenta, le llamó el coronel César Augusto Bonilla del Estado Mayor Presidencial para una entrevista en Campo Marte, más adelante hubo otra con Marta Sahagún en Los Pinos de la que salió temblando.
En mayo comenzó a trabajar y de inmediato llegaron los primeros eventos a gran escala, como el que se ofreció al presidente español José María Aznar con un menú de Occidente: envueltito de phila con pulpo a la diabla y espárragos, pato en chilmole, y de postre una cassata de coco con mango, decorada con los colores de la bandera del visitante.
"Más adelante conocí a los presidentes de Guatemala, República Checa, Lituania, al príncipe Carlos de Inglaterra y al presidente electo Luiz Inácio Lula da Silva de Brasil. También hubo giras a Panamá, El Salvador y a Chile.
"En una gira a Estados Unidos, poco tiempo antes de los atentados a las Torres Gemelas el 11 de septiembre del 2001, tuve que preparar una comida de último momento en la Casa Blair (casa de huéspedes frente de la Casa Blanca), por lo que investigué dónde conseguir servicios de banquete en Washington la noche antes", recuerda el chef Bossuet Martínez.
Era común, agrega, que viajara con una maleta de ingredientes al vacío o enlatados, por ejemplo la machaca enlatada me salvó en varias ocasiones, como en un desayuno con las primeras...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba