Exploran áreas de diversiones
| Autor | Yanireth Israde |
Testigos de una época que, en el camino hacia la modernidad, reservaba en las urbes espacios públicos para el juego, vestigios de destacadas áreas de solaz infantil aún perduran sin reconocimiento, aunque fueron obra de arquitectos como Luis Barragán, Mathias Goeritz o Teodoro González de León, entre otros creadores relevantes.
El historiador de arte Aldo Solano Rojas recupera en Playgrounds del México moderno, libro publicado por Cubo Blanco, la historia de estos territorios de recreo, provistos de mobiliario a la medida de los niños, parte de un proyecto nacional ahora en el olvido.
"Fue una labor detectivesca porque, aunque todo el mundo los ubica, nadie sabe quién los hizo, pero sus autores tienen nombre y apellido", destaca el también artista en el Parque Miraflores de la Colonia San Pedro de los Pinos, sito que aún preserva animales de cemento -un hipopótamo, un oso, un toro- concebidos por el arquitecto Alberto Pérez Soria, ejemplo del mobiliario repartido en diversos jardines del País.
Interesado en el espacio urbano, en el "afuera" -al que se regatea valor precisamente por su condición exterior y de uso común-, indagó en archivos públicos y privados para su tesis de maestría, antecedente del libro que presentará el 27 de julio a las 12:00 horas en el Museo Experimental El Eco, acompañado de las investigadoras Louise Noelle y Dafne Cruz, así como de Inbal Miller, su editora.
"Fui descubriendo cómo, después de la Revolución, había preocupación por una infancia que vivió la violencia de esta guerra civil, la pobreza también, y desde la SEP empezó a tratarse como una clase social que debía ser cuidada, moldeada, protegida. Esto tardó tiempo en decantarse hacia cosas materiales, pero empezó desde los años 20-30, y es hasta finales de los 50-60 cuando tenemos el culmen de un gobierno haciendo infraestructura para los niños, para cuidarlos y estimularlos", explica.
La multiplicación de los playgrounds en los parques del País, o en unidades habitaciones, indicó a Solano Rojas que los constructores debieron disponer de respaldo, recursos gubernamentales y soluciones que perfilaban una escuela de mobiliario infantil.
"Con ejemplos relevantes y replicados en todo el País, como los peces de Teodoro González de León o los juegos de Pérez Soria, identifico un estilo mexicano de
playgrounds hacia los años 80; que se frustra con la entrada del neoliberalismo. Todos tienen la idea de durar a través del material concreto, masivo, y también hay una...
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