¿Falso o verdadero?
| Autor | Víctor Juárez |
La historia de los usos de suelo en la Ciudad no podría contarse sin el origen de los derechos adquiridos.
Estos derechos de uso de la propiedad han sido parte importante del conflicto entre autoridades, vecinos y empresarios los últimos años a raíz del establecimiento de comercios y desarrollos que, en ocasiones estirando sus permisos con apoyo de autoridades, despertaron la ira de sus comunidades.
Por ejemplo, en Miguel Hidalgo, principalmente en Lomas de Chapultepec y Polanco, documentos que datan desde 1990 se han convertido en manzana de la discordia para colonos, autoridades y empresarios.
En ocasiones, sobre estos documentos pende la duda sobre su autenticidad, pues muchos se presumen falsificados.
REFORMA consultó a especialistas, funcionarios y ex funcionarios para conocer las circunstancias por las que dichos oficios de la entonces Coordinación General de Reordenamiento Urbano y Vivienda del Departamento del DF sobreviven y traen consigo inconformidades y litigios.
'POLANCO SE INCENDIÓ'
Hoy, como hace 30 años, vecinos de las zonas residenciales de MH han exigido mantener sus colonias estrictamente habitacionales.
Así recibió Jorge Gamboa de Buen los programas delegacionales renovados durante la gestión de Ramón Aguirre Velázquez al frente del Departamento del DF y con la llegada de Manuel Camacho Solís a la regencia en 1988.
"Polanco ya tenía muchos usos diferentes. De repente habían edificios altotes de departamentos. Los vecinos habían dicho: queremos que Polanco sea habitacional. Tú veías el plan y era todo amarillo (el color del uso habitacional)", relató Gamboa de Buen, ex coordinador de Reordenamiento Urbano y Ecología (Cegrupe).
Como política para controlar el desarrollo urbano de las colonias en los años por venir, fue responsable de la creación de las primeras Zedec (Zona Especial de Desarrollo Controlado), expedida en 1992.
Los orígenes de las mismas estuvieron en Polanco, mediante la cual se buscó armonizar los usos existentes en la colonia y evitar la especulación, pues tendría una vigencia de 15 años.
Pero la generación de la Zedec demandaba trabajo y la Cegrupe era una coordinación pequeña, por lo que el equipo de Gamboa debió emitir una respuesta temporal a los propietarios cuyos usos comerciales habían quedado entrampados con los Planes Delegacionales aprobados en el sexenio anterior.
El resultado fueron los certificados de derechos adquiridos, que entonces eran simplemente oficios de regularización del uso de...
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