Falta a México tradición coral

AutorDiana Gutiérrez

En México no existe una tradición coral, menos aún un movimiento que agrupe a los conjuntos que, de manera aislada, se dedican a cantar en escuelas, parroquias y en recintos culturales cada Navidad.

"Si bien hay más agrupaciones corales no hay unión entre ellas. Entonces los esfuerzos por propiciar su desarrollo son escasos y están desvinculados", señala Patricia Carbajal, directora del Ensamble Coral Voce in Tempore, creado en 1989.

Tanto Carbajal como Manuel Rosillo, director del Coro de Infantes y de la Capilla de Música de la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe, consideran que la separación gremial es el resultado de una idiosincrasia que no contempla el trabajo en equipo entre sus rasgos característicos.

"No tenemos la costumbre de emprender proyectos juntos. Tenemos muy buenos cantantes solistas pero no sobresalimos en lo gregario, en comparación con los países que han sufrido conflictos sociales y por la fuerza han aprendido a cooperar", comenta Carbajal.

Los músicos y cantantes contribuyen al menosprecio en que la actividad coral se sumió, en mayor medida, a partir del siglo 19, cuando, según el promotor Gerardo Rábago, se favoreció a los autores y artistas europeos, especialmente franceses.

Impera un prejuicio hacia el trabajo realizado por los coralistas; se considera un arte fácil y menor, observa el director de la Coordinación Nacional de Coros del Sistema Nacional de Fomento Musical, Alejandro León.

Para Carbajal, el mayor enemigo de los artistas que se dedican a la música -denominado en el argot laboral como "el hueso"- también afecta a la escena coral.

"Desde los recién egresados de las escuelas hasta los más veteranos aceptan la pronta contratación en la que con sólo ir a cantar en una misa o una fiesta reciben una paga. Entonces se desvirtúa el significado del coro", apunta.

Un coro, aclara, es un instrumento musical construido por seres humanos. El escultor del sonido es el director coral y la materia prima son los coralistas.

De acuerdo con cifras de la Coordinación Nacional de Coros, en el País existen 900 coros y el 40 por ciento congrega a niños. El resto está compuesto por coros universitarios y congregacionales -aquellos que cantan en algún templo; sólo diez son profesionales.

El Distrito Federal es la entidad con mayor oferta corista, le siguen Guadalajara, Monterrey, Guanajuato, Colima y San Luis Potosí.

"En realidad hay mucha demanda de directores, pero no los hay porque las escuelas no los forman. En el DF...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR