Federico Wilkins / ¡No hay quinto malo para Sarita!
| Autor | Federico Wilkins |
Al día siguiente de terminar con su cuarto matrimonio, Sarita Montiel salió bien temprano de su casa "más contenta que una Pascua". Caminaba muy despacito rumbo a su primera clase de aerobics. Iba con la cara sin maquillar, su cabello escaso, pintado de rojo y en chonguitos como una colegiala. Llevaba además sus gafas Gucci para el sol, como si nadie la fuera a reconocer.
A esas horas de la mañana y fuera de los escenarios, María Antonia Abad Fernández representa muy bien los 76 años que cumple este 10 de marzo. Ya están lejos aquellos tiempos en que Franco la enviaba a dar conciertos a la Unión Soviética y Rumania a cuenta de que mandasen petróleo y madera a España.
Los reporteros habían madrugado para arrancarle una declaración sobre el hombre que acababa de tirar a la intemperie como se tira un juguete roto.
"Ahora si diré todo sobre Tony" -dijo a las cámaras.
Por eso, Antena 3 le pagó lo que ella quiso para que se sentara en su programa Dónde Estás Corazón. Para que dijera lo que no había dicho del cubano que la regresó a los titulares del "cotilleo".
Sarita entró al estudio sostenida por los codos por un par de edecanes que no habían nacido cuando ella hizo su última película en 1973. El público la recibió entre aplausos y serpentinas celebrando su divorcio. Pero con el último confeti comenzó para la Montiel un paredón de preguntas y reclamos de unos panelistas que de "mentirosa" no la bajaron.
-¿Me vas a decir que no sabías que Tony era maricón y pareja de Armando del Rosario?
Me enteré, como quien dice, antes de ayer.
-¿Es cierto que Tony vendió tu expediente médico donde se dice que estabas muy mal de la "chaveta" y que intentaste matarte?
Por eso le puse una demanda por difamación.
-¿Cómo aguantas que este sinvergüenza ponga en duda la sexualidad de tu hija y te llame a ti mala, loca, zorra, embustera, miserable y vieja?
¡Es que soy una vieja!- dijo para que le regresaran: ¡Sí, pero no eres mala, ni miserable, ni lo demás!
-¿Es cierto que te pagaron por entrevistarlos a los dos, sin que Tony supiera que tú estabas cobrando por el show?
¡Momento! -y levantó la mano en señal de stop- ¡No compares a Tony con Sara Montiel que yo tengo mi caché y siempre he cobrado por entrevistas como ahora que estoy sentada aquí!
-Mírame a la cara y dime que no vendiste los videos de tu luna de miel.
No.
- ¡Mientes! ¿Es cierto lo que dice Tony que tuvieron que darte unas puntadas en el hospital en tus partes íntimas después de que él te hizo muy fuerte el sexo?
No es cierto. ¡Pero yo hacía el amor con Tony estupendamente como cualquier matrimonio!
-¿Es verdad que prometiste partirle las piernas a Tony si publica las fotos que te robó de tu hermana Elpidia sin peluca?
¡Las piernas no...
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