Felipe VI: Un Rey en tiempos de crisis

AutorKaty Díaz

La historia de España cambiará en los próximos días: el 19 de junio, tentativamente, en una sobria sesión se le dará la bienvenida a su nuevo Rey, al Rey Felipe VI, en quien los españoles tienen puestas todas sus esperanzas.

Felipe Juan Pablo Alfonso de Todos los Santos de Borbón y Grecia, de 46 años, asumirá el trono en un momento crítico para su país, pues además de la crisis económica y el desempleo que dejan huella entre sus súbditos, tendrá que lidiar con una muy deteriorada imagen de la monarquía.

Los optimistas creen que Felipe será un rey intachable. Hoy, la opinión pública española, lo considera un hombre de principios que tiene como obsesión ser útil a su país. Algunos auguran que su reinado será moderno, transparente, más ágil que el actual, y cercano con el pueblo.

Lo cierto es que el todavía Príncipe de Asturias no tiene una tarea fácil y en su reinado se enfrentará a muchos desafíos.

¿PREMIO O CASTIGO?

Acostumbrados a ver sólo el lado mediático y de celebridades que tiene la realeza europea, sobre todo la española, muchas veces dejamos de lado la importancia como figura pública y política que los reyes actuales tienen en sus países.

En el caso de España, la llegada de Felipe al trono es un acto que cambiará la historia de la península ibérica, pues el Rey es mucho más que una figura ornamental.

El Estado español es una monarquía parlamentaria, esto quiere decir que el Jefe de Estado es el Rey.

Por eso se dice que España es un reino. Desde 1975, el Rey fue Don Juan Carlos, de la dinastía de los Borbón, quien ahora cede el trono a su hijo Felipe.

Como Jefe de Estado, Felipe VI será el jefe del Ejército y el máximo representante de España ante el mundo.

Por lo tanto, la actuación del nuevo y joven Rey será vital en muchos aspectos.

PRIMERO EL REINO, LA FAMILIA DESPUÉS

Desde ahora se especula que en cuanto Felipe suba al trono, las infantas Elena y Cristina dejarán de formar parte de la familia real, además de que no tendrán participación en actos oficiales y ya no recibirán gastos de representación.

¿Por qué esta difícil decisión? Porque su padre le deja el trono, sí, pero también una serie de problemas y presiones con las que deberá lidiar.

El viaje de cacería de Juan Carlos a Botswana, sus múltiples infidelidades, así como la acusación legal por peculado contra la infanta Cristina y su esposo, Iñaki Urdangarin, en un caso de corrupción afectaron enormemente la imagen de la familia real.

Felipe VI, quien tendrá el privilegio de...

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