Una fiesta de cumpleaños para Harold Pinter

AutorFernando de Ita

A sus 75 años, Harold Pinter, el dramaturgo vivo más importante de la lengua inglesa, recibió de regalo de cumpleaños el Premio Nobel de Literatura. Nacido el 10 de octubre de 1930 en Londres, Pinter comenzó a escribir poemas y a rebelarse en contra del poder establecido a los 14 años. Sus primeros poemas fueron de amor y sus primeras batallas en contra del antisemitismo que se daba en los barrios duros de la capital inglesa. En 1948, enfrentó un juicio por negarse a cumplir el servicio militar, en un país en el que se consideraba un honor este llamado, luego de la victoria sobre Alemania. Desde entonces, ha sido, en sus propias palabras, "un dolor en el ano" para el sistema establecido, tanto en Inglaterra como en el mundo.

Crítico implacable de Tony Blair y George Bush, Pinter ha sido un activista político en movimiento, que no se conforma con escribir artículos sobre las causas que apoya sino que gusta de visitar los lugares en conflicto. Así estuvo en Nicaragua en los años 80, y aunque no visitó la Selva Lacandona, dijo lo siguiente sobre el movimiento zapatista, en el 2002: "Estoy convencido de que una de las inspiraciones de estos días en la lucha por un mundo más justo, ha sido la Revolución Zapatista en México, una extraordinaria revolución pacífica, por cierto, con una declaración de principios que vale la pena escuchar. Ellos le han dicho al mal gobierno: Nosotros somos libres y por ello no obedecemos sus reglas. Nosotros no nos adherimos a lo que ustedes quieren. Somos muy pobres. No tenemos absolutamente nada, pero tenemos algo: la determinación de restaurar nuestra dignidad".

Son varias las ligas que Pinter tiene con México: Carlos Fuentes, su amigo y traductor; Ludwik Margules, quien estrenó en 1974 La fiesta de cumpleaños, y 20 años después Tiempo de fiesta y Luz de luna, y Damian Fraser, uno de los seis hijos de la mujer de su vida, la escritora Antonia Fraser.

En uno de sus varios viajes a México, Pinter visitó las pirámides de Teotihuacán. En la cima del templo de Quetzalcóatl, le pregunté: "¿Usted siente, como David Herbert Lawrence (el autor inglés de La serpiente emplumada), que éste es un país sanguinario?".

Respondió: "Todos lo son. Recuerda a Shakespeare".

En la escena nacional

La carrera formal del Premio Nobel 2005 no es de dramaturgo sino de actor. El joven Pinter estudió en la Royal Academic of Dramatic Art de Londres, y formó parte de una compañía de repertorio, hasta que escribió The room, en 1957, estrenada en...

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