Froylán López Narváez/ Porfiriorremigismo y EUA
| Autor | Froylán López Narváez |
Las especulaciones borrosas sobre el resultado electoral de la elección, sobre todo por el presidente norteamericano número 43, fueron motivos de razonamientos, temores y expectativas. Los vaticinios fundamentados en encuestas, sondeos y experiencias pasadas, se inclinaban levemente, las más, a favor del miembro del nepotismo sureño del clan Bush y sus cofradías de poder: papá Bush Presidente, hijos gobernadores de Texas y de Florida.
La ignorancia y la bobería hacen creer que, en verdad, en los Estados Unidos de América se practica democracia directa, pulcra. A pesar de que hay patrocinios de empresas grandes, petroleras, de los medios de comunicación, de corporaciones religiosas de todo credo, real o fingido y aun de intereses extranjeros. En el caso de William Clinton se habló de intereses asiáticos que ofrecieron dineros para las campañas demócratas.
Si en todas partes del mundo puede identificarse el juego social de las elecciones con buena parte de los juegos carnavalescos, en los Estados Unidos la analogía se magnifica. Y también allá la disputa del poder se amplía en los periodos. Dos años de campaña de Gore y Bush. Aquí Vicente Fox arrancó tiempo atrás para lograr su cometido, primero, de usar la banderola del PAN y luego obtener los votos de una minoría decisoria. Según vaticinios, las votaciones de los electores norteamericanos llegarán a la mitad. Se calculaba en un 50 por ciento el abstencionismo. Si esto se cumple, quien gane será electo por una cuarta parte de los electores registrados.
Igual que México, Vicente Fox fue electo por una minoría electoral. Si se considera que en México el abstencionismo fue de un poco más del 30 por ciento, si se toma en cuenta el voto priista adverso, lo mismo que los votos del PRD y de los partidos minúsculos, se advertirá que el candidato con insignia panista fue electo por una minoría electoral. Se vale y se acepta. Pero no fue un ciudadano escogido por mayoría electoral.
Es admitido que los Estados Unidos de América son la única superpotencia. Militar, económica y tecnológicamente no hay nación ni agrupación de naciones que posean su eminencia, actualmente. Por lo tanto, son el adversario o enemigo a vencer. A pesar de sus recreos con puros y con señoras, Clinton y adláteres consiguieron que los grupos dirigentes empresariales y funcionarios privados accedieran a ingresos y bienestares grandes. Pero al mismo tiempo y por lo mismo "...también es una sociedad que ha mostrado en las dos...
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