Froylán M. López Narváez / Apocalipsis panista

AutorFroylán M. López Narváez

Además de entrever un presunto fin del mundo, un apocalipsis alude a una situación tremenda u horripilante. Desde hace años, de no ser casi siempre, en México las vivencias nacionales de temor, horror, pavor y miedos envenenan a sus metrópolis, en no pocos pueblos y rancherías. La numeralia viscosa acrece o desciende, pero no para.

Junto con enfrentamientos criminales, aumentan las diatribas, las polémicas, las calumnias, los espionajes, las traiciones y deslealtades. Pugnas entre panistas se expresan en apocalipsis fuertemente. Frustrado por una candidatura senatoril que no le conceden, Javier Corral, destacable militante del PAN, se queja abiertamente de injusticia, de ilegalidad.

Con cólera manifestada, el chihuahuen- se espetó reclamaciones propias de un contrario priista: "Exijo se anule este proceso y daré la batalla que sea necesaria (podría verse, se acota aquí) para que se limpie la imagen (de quedar alguna) y paguen caro los responsables de esta afrenta".

Acusó de traidores y decepcionantes a sus compañeros (?) de partido, Cruz Pérez Cuéllar y Carlos Borruel, que le causan pena ajena, en un su dicho rotundo. Y más: en sus jornadas electorales se dio uno de los más insultantes acarreos de votantes. Pruebas: tres videos con testimonios de votantes, "emboletados" con pasajes y complicidades, en espera de entrega de despensas y algunas otras transas por "ayudas".

La quejumbre e ira no se expresaron únicamente en el estado del norte mexicano. En Veracruz se denunció (el abatido Alejandro Vázquez) "Los resultados provienen de los recursos públicos, de la pobreza y de la manipulación electoral", no ofreció pruebas ni detalló. Porquería electoral como las de sus opositores tricolores en sus peores y malignos tiempos, no del todo lejanos.

Y más lodo: corrupción, denuncias, lamentos en el Estado de México. La dirigencia regional panista anticipó tiempos, violó procedimientos con jirones blanquiazules. Discrepancias entre los presurosos y los resultados oficiales. Pero su presidente de la Comisión Nacional de Electores, José Espina, se hizo el occiso, y aseguró que no había sido notificado de denuncias en las comisiones electorales de los estados.

A mayor abundamiento horripilante, el CEN priista usa ilicitudes que imputa a dos santones panistas, Ernesto Ruffo Appel y Eugenio Elorduy, por vínculos con el narcotráfico. Presuntamente temen y se encabritan porque los panistas quieren usar un recurso...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR