Froylán M. López Narváez / Changarrismo educativo

AutorFroylán M. López Narváez

Es importante la polémica entre principales de la Universidad Nacional Autónoma de México y de la Secretaría de Educación Pública. Es frontal y claridosa. Es personal, se señalan nombres de funcionarios federales y se puntualizan datos y cifras, no menos que estimaciones. Tendrán que salir cuentas claras y acciones eficaces, igualmente que compromisos exigibles.

El rector de la UNAM, doctor Juan Ramón de la Fuente, protestó por el maquillaje de cifras, presuroso y contradictorio, que ofreció la SEP, en torno a la necesidad, oferta y demanda de aspirantes a la llamada educación superior. No se han puntualizado y controvertido, ahora, las ponderaciones sobre la educación que no se llama inferior y que se estima fundamental o primaria. A pesar de mucho, las escuelas públicas ofrecen frecuentemente resultados evaluados como mejores, en los tres rangos con los que se maneja la parte mayor de las escuelas superior, media y primaria.

El mismo secretario Reyes Tamez Guerra desconoció, no refutó con precisión, los reproches de De la Fuente. Adujo que "no sé a que se refería él (el rector) concretamente". No obstante, algunos encargados de la administración y la política oficial de la UNAM replicaron con calificaciones y referencias puntuales. Es el caso del secretario general de la Universidad fundadora, directa o indirectamente, de las instituciones de cultura superior (ciencias y artes, principalmente) del país, Enrique del Val.

El secretario general sostiene que las discrepancias entre las cifras de la SEP y la UNAM no son admisibles. Tanto que se afirma que "es peor mentir con las cifras. Es una grave responsabilidad". Los miembros de la rectoría hacen saber que los informes manejados provienen de fuentes oficiales. Surgen de un estudio del actual subsecretario de Educación Superior de la SEP, secretario entonces de la ANUIES, cónclave de universidades e instituciones de estudios mayores. Ya se ha dicho que, también en esto, el déficit es grande, apremiante, muy lamentable.

El manejo de la información que ofrece la SEP, sostiene Del Val, es doloso, en cuanto se cambian u ocultan las cifras. Así, no valora que la UNAM ha logrado un egreso cercano al 75 por ciento. No se admite que no se reclamen un millón de lugares, conforme a los estudios de la ANUIES, del propio subsecretario Rubio. Los tamecianos alegan que se necesita medio millón de lugares y que ocurre que sí hay ofertas para lograr ingresos en otras instituciones. Pero no dicen adónde...

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