Genaro Lozano / El grito más triste

AutorGenaro Lozano

Este 2020 ha sido un año terrible. En muchos sentidos un año perdido. México es de los países más afectados por la pandemia, con al menos 71 mil muertes reconocidas oficialmente, con el sistema de salud que resiste la emergencia sanitaria más importante en la historia de la humanidad, pero que ha dejado de lado la atención a todo lo demás. Un sistema de salud que sin colapsarse está colapsado. Con una economía que será de las más afectadas en el mundo y que creará millones de nuevos pobres. Y frente a esta emergencia, "el mejor gobierno en el peor momento" no está liderando para unir al país, sino profundizando la división.

Es cierto, México no es Twitter. Es cierto, a muchas personas les falta territorio y les sobra escritorio. Si uno de los más severos críticos tuiteros de este gobierno viaja a las localidades rurales del país, encontrará cientos de bardas con pintas lopezobradoristas. Si ese tuitero platica con vendedores o dueños de tiendas de abarrotes sobre la situación del país, verá que la gente sigue teniendo esperanza y que sigue confiando en AMLO, que lo prefieren por mucho respecto a Peña, Calderón o Fox. Y no está difícil. Hasta quienes dudamos cada vez más del rumbo emprendido seguimos prefiriendo este gobierno frente a los 3 últimos.

La brecha se ensancha entre lo rural y lo urbano, mientras que en las ciudades la grieta parece ampliarse por clase, educación y género. México parece ser ya una de las sociedades más polarizadas y politizadas del mundo. Y esto causa escozor entre quienes prefieren un pensamiento dominante, en ambos lados del espectro. Escozor entre quienes perciben nubarrones, destrucción de instituciones y un gobierno incompetente, pero también escozor entre quienes piensan que éste es el gobierno más criticado en la historia, el que está terminando con la era neoliberal, el "mejor gobierno en el peor momento". Y la realidad está en algún punto intermedio.

AMLO ganó hace ya poco más de dos años. Su Presidencia inició oficialmente en diciembre del 2018, aunque Peña dejó de gobernar desde el triunfo de Morena. A la distancia, se percibe ya un desencanto entre los votantes de izquierda que no eran lopezobradoristas, pero que o creyeron en su proyecto y/o que querían sacar al...

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