Genaro Lozano / #YaSeTardaron

AutorGenaro Lozano

Hace apenas unos años, el gobernador panista de Jalisco decía sin tapujos que los gays le daban asquito. Emilio González, con unos tragos de más, sin vergüenza alguna decía que le valían madres los cuestionamientos de la sociedad jalisciense por donar dinero público para un centro religioso, desafiando el Estado laico.

Esta semana, la Suprema Corte de Justicia acaba de enterrar en Jalisco lo que la filósofa Martha Nussbaum llama "la política del asco" al invalidar los artículos del código civil que permitían el matrimonio solo a una pareja conformada por un hombre y una mujer. Con ello, la Suprema Corte obliga a los legisladores jaliscienses a reformar sus leyes para permitir el matrimonio civil también a las parejas del mismo sexo.

El eco del ex gobernador González tuvo una perversa influencia en la clase política de Jalisco. En el 2012 no hubo un solo candidato a la gubernatura que se distanciara de los dichos del "góber piadoso". Aristóteles Sandoval, del PRI, se limitaba a repetir la fórmula de Peña Nieto: no estoy en contra de los matrimonios gays, pero toca al congreso. En otras palabras, Sandoval no estuvo a la altura del momento y se negó a impulsar una reforma, como sí lo hizo el PRI de Coahuila en 2007, con los Pactos Civiles, y el de 2014, con el matrimonio.

Por su lado, Enrique Alfaro, de Movimiento Ciudadano, emulaba a AMLO cuando se negó a defender los matrimonios gays como candidato a la gubernatura y luego como candidato a la alcaldía de Guadalajara en 2015, incluso se manifestaba en contra de la adopción de menores por parte de parejas del mismo sexo. La influencia del tufo conservador de González se sintió incluso en el joven independiente Pedro Kumamoto, quien tuvo una defensa tibia de los derechos de las parejas del mismo sexo como candidato a diputado local y recientemente, ya como diputado, decía que "hay que socializar" estos temas.

El movimiento LGBT de Jalisco es el segundo más fuerte del país después del de la Ciudad de México. Las marchas del orgullo en Jalisco son concurridas cada año, los empresarios LGBT realizan foros y dominan las noches en Guadalajara y el turismo LGBT en Vallarta deja muchísimo dinero cada año. Organizaciones como el Colectivo Fadis o Codise han profesionalizado su labor en contra de la discriminación, en defensa de la salud y a favor de los matrimonios igualitarios con aliados en las universidades como el ITESO y con cabildeo legislativo.

Pese al dominio del PAN de la...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR