Gustavo Fondevila / Invasión de tierras en el DF
| Autor | Gustavo Fondevila |
El lunes pasado a las 5 de la tarde, alrededor de 100 personas armadas con palos, piedras, bombas molotov y armas de fuego se acercaron al predio ubicado en la calle Mayas número 15, en la Colonia Ajusco Coyoacán, para desalojar a los integrantes del Frente Popular Francisco Villa que hace más de 15 años se asentaron en dicho lugar. Se desató de inmediato una batalla en el campamento cuando los agresores prendieron fuego a cuatro casas de madera. El enfrentamiento duró más de 3 horas y alcanzó su punto máximo cuando se produjeron disparos y varios hombres cayeron heridos de bala. Los vecinos denunciaron los hechos a las 18:00 horas. La Policía se acercó al lugar a las 18:30 horas, pero recién se animó a intervenir a las 20:30 horas, es decir, exactamente 2 horas después de haber llegado al lugar del conflicto ya con muchos heridos, balazos y destrozos. Entonces, los 60 granaderos enviados desalojaron a los agresores, curiosamente, sin detener a ninguno, restablecieron la calma y los heridos pudieron ser trasladados a un hospital.
TIERRA DE NADIE
Este es un episodio más de una larga serie de problemas con la tierra en el DF. La Ciudad de México tiene una superficie de mil 499 kilómetros cuadrados y una población de 8 millones 851 mil habitantes. A simple vista se puede comprender el problema: mucha gente en un espacio pequeño lo que resulta en déficits urbanos y rezagos sociales. Históricamente esto ha significado ocupación irregular de la tierra, crecimiento desmesurado y no planeado de los asentamientos humanos, alta demanda de servicios, especulación inmobiliaria y procesos expropiatorios. Pero en realidad, el problema no es la falta de espacio sino de una política de desarrollo urbano inexistente. La principal dificultad de la propiedad, el uso de suelo y la tenencia de la tierra es que no se ha desarrollado una política urbana a largo plazo. Y esto ha servido para que la verdadera planificación esté definida por inmobiliarias, especuladores y una amplia gama de estafadores que han controlado el crecimiento urbano sobre la base de la ocupación violenta de predios, invasiones y despojos. Muchas veces con la propia connivencia de las autoridades. No por casualidad, en el 2012 la Comisión de Derechos Humanos del DF (CDHDF) emitió la recomendación 19/2012 dirigida a las autoridades capitalinas por tolerar el establecimiento de asentamientos humanos irregulares en el Área Natural Protegida "Ejidos de Xochimilco y San Gregorio Atlapulco".
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