¡Habemus restaurantes!

AutorTeresa Rodríguez

Los restauranteros atisban un claro de luz al final del túnel. El semáforo naranja trajo la reapertura el miércoles 1 de julio.

Las restricciones son diversas. La más preocupante, quizá, la limitación de aforo, pues quienes operan en un local encerrado con ventilación artificial tienen permitido ocupar sólo 30 por ciento; los establecimientos con ventilación natural pueden aspirar al 40.

"Con un 30 o 40 por ciento claro que no haces negocio, no alcanzas ni el equilibrio. Empiezas a hacer negocio con el 70-80 por ciento de ocupación.

"Pero, de estar cerrado y con todos los compromisos monetarios, a abrir y tratar de alcanzar el aforo de 30-40, más servicio a domicilio, pues estás más cerca de no perder", dice Germán González, presidente de Cadenas de Restaurantes de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac).

Al representante de los restauranteros le parece que entre las restricciones que inhibirán a la gente está la de sólo permitir cuatro personas por mesa; además del horario de cierre, establecido a las 22:00 horas.

MÁS REGLAS, MÁS GASTO

"Al principio, hablaron de que el semáforo cambiaría después de 15 días de inhibir contagios y de repente dijeron: '¡qué creen, ya cambio!'.

"Entonces fue momento de invertir los últimos centavos que no tenías", dice Abel Hernández, propietario de Grupo Culinaria Chic, quien además de adquirir productos químicos y equipo sanitario, modificó las ventanas fijas para hacerlas móviles.

Para más de un restaurantero lo confuso es que los lineamientos varíen de entidad a entidad. Incluso hay diferencia de criterios entre alcaldías.

"En algunas alcaldías dijeron que no podíamos mover el mobiliario; en otras dijeron que sí. El número de personas por mesa tampoco está claro: las alcaldías dicen que son cuatro y a nivel federal se permiten ocho", detalla Ramón Orraca, socio de Grupo Bonito.

La Canirac diseñó hace un mes el protocolo Mesa Segura, priorizando la higiene y cuidando la secuencia del servicio. Ahora la CDMX añade restricciones no contempladas en el programa aplicado en casi todo el País.

"Una de las cosas que no habíamos puesto era tomarle la temperatura a cada cliente. Aquí, además de tomarla, vas a tener que hacer preguntas sobre síntomas y exposición.

"El comensal tiene que usar cubrebocas para entrar", explica Germán.

Pese a no generar ingreso suficiente, los restauranteros han invertido en modificaciones y equipo para cumplir con los lineamientos de...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR