Hacen rodar a la CDMX
| Autor | Isaac Flores |
FOTOS: IVÁN SERNA
Un miércoles a las 9 de la noche, cinco jóvenes se reunieron con sus respectivas bicicletas en el Ángel de la Independencia. Era 1998 y el grupo inauguraba así la tradición de hacer un paseo nocturno todos los miércoles.
Los jóvenes pertenecían a Bicitekas, una organización que buscaba impulsar a la bicicleta como medio de transporte cuando ésta era considerada un vehículo utilitario o, a lo sumo, para ejercitarse los fines de semana. En ese entonces no lo imaginaban, pero la práctica se convertiría en un hábito semanal al que se sumarían más y más ciclistas.
Todavía hoy en día, el Paseo Biciteka llega a reunir a 250 ciclistas.
"Dijimos '¿por qué nos sentamos cada miércoles a discutir sobre cómo implementar la bici, haciendo proyectos, encarar políticos, etcétera, si podemos rodar?", recuerda Tom Dieusaert, miembro fundador de Bicitekas y participante de ese primer paseo.
"El paseo biciteka nocturno tenía ese valor de demostrar que sí hay gente que quiere andar en bici por la ciudad y que, incluso, lo hace de noche; más de un automovilista que llegaba al Ángel debe haber pensado '¿y esos loquitos?´".
Luego de 20 años, las bicicletas son ya un medio de transporte habitual para oficinistas y estudiantes. Diariamente, en la Ciudad de México se realizan 240 mil viajes sobre dos ruedas, de acuerdo con cifras de la Encuesta Origen-Destino 2017.
De ser un vehículo recreativo, hoy la bici es reconocida como una solución a los problemas de movilidad y contaminación. A nivel mundial, esto quedó en abril pasado, cuando la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 3 de junio como Día Mundial de la Bicicleta.
En la CDMX, los recorridos ciclistas son cotidianos; los hay nocturnos y de fin de semana. Desde los que recorren Chapultepec hasta los que se enfilan hacia Coyoacán, más de 60 grupos ciclistas se organizan para pasear todos los días de la semana.
LES ABREN CAMINO
Hace tres meses, Arturo Mendoza, de 35 años, decidió dejar el transporte público para pedalear desde su casa, en Naucalpan, hasta su trabajo, en la colonia San Miguel Chapultepec.
"Le entré para ahorrar un poquito de pasaje con la bici, sí es un poco más pesado, pero ahorro unos cien varos de perdida a la semana", dice, con el aliento ligeramente entrecortado y transpirando cuando se encuentra en medio de su recorrido de 12 kilómetros.
En el último tramo de su recorrido, Mendoza se incorpora a la ciclovía que se abre camino por el Bosque de Chapultepec y...
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