Hallan raíz barroca en el son jarocho
| Autor | Sergio Raúl López |
En el son jarocho se ha conservado, en medio de muchas influencias, la presencia viva de la música barroca popular europea, con una pureza que los especialistas no habían imaginado, lo cual, indica Antonio Corona, es un fenómeno único en el mundo:
Desde hace unos 10 o 15 años, añade Isabelle Villey, se ha conectado a la jarana como "hija directa de la guitarra española o barroca del Siglo 17 y 18". De este instrumento europeo, añade, se expanden todas las guitarras regionales en México: la huapanguera, la jarana o la tua michoacana.
Todos ellos recuerdan al instrumento antiguo por su forma, por sus cuerdas dobles y por sus afinaciones, remitiendo directamente al instrumento original traído por los conquistadores, explica la investigadora. Tanto Corona como Villey son intérpretes especializados de guitarra barroca, vihuela, laúd y tiorba, instrumentos antiguos de la familia de la cuerda pulsada, cuyo repertorio principal es la música barroca europea.
Los ecos de estas danzas populares, algunas de las cuales poseen más de 300 años de antigüedad, pueden oírse en la Plaza Martha de la ciudad de Tlacotalpan, donde hoy por la noche concluye el 22 Encuentro Nacional de Jaraneros y Decimeros que congrega, desde el 31 de enero, a más de 400 músicos y 50 poetas de Veracruz y los estados circunvecinos.
"El de Tlacotalpan es un evento muy emocionante, porque prácticamente estamos reviviendo lo que cuentan algunas crónicas antiguas desde el Siglo 18", cuenta Villey.
Esta, que es una de las reuniones más importantes de la música popular en México, posee un gran atractivo para los músicos como Corona, que intentan hacer "interpretaciones históricamente informadas" (hip, por sus siglas en inglés) con el repertorio barroco.
"Al cotejar lo que dicen los manuales antiguos sobre ejecución, con lo que hacen los músicos populares jarochos encontramos que responde a instrucciones del tratado original del barroco que cuesta mucho trabajo intentar, como en el caso de la ornamentación del rasgueado, pues la terminología es vaga", señala.
No es difícil percatarse de la similitud, añade el investigador, pues una vez que las cosas "empiezan a caer en su lugar, es fácil encontrar esta supervivencia en instrumentos, técnicas, repertorio, danzas y conjuntos instrumentales.
El barroco popular español, aclara, es un área poco común y no tiene mucho que ver con los autores tardíos como Bach, Vivaldi o Telemann, si bien la música de todos ellos se nutría de la música popular...
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