La historia del tiro penal: Tiempos de cambio ( II )

Reforma / Especial

Segunda de tres partes

Cuando en 1891 el irlandés Reid convenció a los otros delegados de la International F.A. Board de la necesidad del tiro penal, la nueva regla se describió en pocos renglones. Cien años más tarde, junto con las decisiones correspondientes del Board, llena casi dos páginas. He aquí una vista retrospectiva del desarrollo técnico del "tiro penal".

- En 1890, la Asociación de Irlanda solicitó que en la sesión del Board se examinara su propuesta del tiro penal, la cual fue retirada antes de la reunión, siendo presentada al Board sin modificaciones un año después:

"Cuando un jugador situado en una zona de 12 yardas (10.97 metros) delante de su línea de meta, pone intencionadamente la zancadilla a un contrario o le sujeta o juega intencionadamente el balón con la mano, el árbitro deberá conceder al equipo contrario un tiro penal que, bajo las condiciones siguientes, podrá lanzarse desde cualquier punto a una distancia de doce yardas de la portería: a excepción del jugador que lanza el penal y del guardameta contrario, todos los demás jugadores tienen que estar por lo menos 5.48 metros detrás del balón. El balón estará en juego cuando se haya lanzado el penal y pueda marcarse un gol directamente".

Las causas en 1891

Una observación más detallada de la nueva disposición, incluida ahora como Regla 13 en las Reglas de Juego generales, permite hacer unos juicios interesantes:

- En 1891 se consieraban causa de penal sólo tres infracciones, poner la zancadilla, sujetar y tocar la pelota intencionalmente con la mano. Ya entonces los árbitros no hacían ninguna diferencia entre infracciones físicas ligeras (juego de mano) y graves (zancadilla), sino que querían sancionar la antideportividad grave de estos actos frente al juego. En el curso del tiempo, se incluyeron los otros casos, los cuales había que sancionar fuera del área de penal con un tiro libre directo.

- El sector de penal se extendía por todo lo ancho del terreno de juego, quedando limitado por la línea de meta de fondo del campo y una línea a 10.97 metros.

- El árbitro, que las reglas de 1891 lo mandaban al terreno de juego con amplios poderes, no actuaba por sí mismo, sino por llamamiento de los equipos ("on appeal"), un privilegio que los jugadores perdieron pronto por su eterno descontento.

- El "tiro penal" podía lanzarse desde cualquier punto de la línea marcada a 10.97 metros.

- Para defender un penal, al guardameta se le permitía alejarse hasta...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR