Un hito ingenieril

AutorIsaac Flores

ENVIADO

CAREYES.- Seguro la culpa es de Hollywood. Porque uno cree que los grandes inventos llegan acompañados de un halo de luz y coros angelicales de fondo.

Pero la verdad es que, al sentarme al volante de la Infiniti QX50 y poner a prueba un motor cuyo desarrollo tomó 20 años y 300 patentes, todo fue bastante "normal".

Así, con comillas, porque el VC-Turbo no deja de ser el primer motor de compresión variable que llega al mercado, y el cual, con cuatro cilindros en línea, puede tanto entregar la potencia de un V6 como ofrecer un rendimiento similar al de un motor de diesel. Para ello, el VC-Turbo ajusta el recorrido de los pistones de acuerdo con la presión que se ejerza sobre el acelerador.

A lo largo de un recorrido en carretera, me mantuve al pendiente del sonido del motor. Intentaba notar algún sonido que delatara el cambio del recorrido en los pistones. Pero, la verdad, es que dicho ajuste es imperceptible y no causa ningún tipo de sobresalto.

O por lo menos, no esa clase de sobresalto, pues basta activar el modo Sport y llevar el acelerador a fondo. Entonces, los 268 caballos de fuerza generados por el VC-Turbo permiten que la QX50 despegue con facilidad en las rectas hasta alcanzar, de forma estable, 180 kilómetros por hora.

Es en ese momento cuando comienzas a dudar que estás a bordo de una SUV con motor 4 cilindros turbo, pues, de hecho, la QX50 es capaz...

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