Un Hollywood afrancesado

AutorJuan Manuel Navarro

Pleitos, groserías, correteadas, premiaciones, pero sobre todo mucha diversión, fue lo que el Festival de Cannes arrojó este año.

El enojo más sonado fue el de Elton John con la modelo Elizabeth Hurley, durante la fiesta de AMFAR.

Al parecer, al cantante británico no le hizo gracias que Hurley llegara acompañada por su amigo sentimental, David Furnish.

El pleito llegó a tal grado, que la ex de Hugh Grant, quien días después del festival anunció su separación del actor de Cuatro Bodas y Un Funeral, se paró de la mesa por las groserías que John le hizo.

El que definitivamente se ganó la antipatía de la gente fue Dennis Rodman, quien cada vez que podía insultaba con palabras a toda mujer que se ponía enfrente de él. Muchos dicen, que el efecto del alcohol provocó la reacción del basketbolista.

Quien obtuvo el primer lugar en simpatía y amabilidad fue George Clooney. El actor acudió a varios eventos sociales y siempre sonriente complacía a sus fans con autógrafos y fotos.

El más protegido de todas las celebridades que visitaron Cannes este año fue el Príncipe Alberto de Mónaco, de quien no se despegaban sus cinco guardaespaldas que lo custodiaron todo el tiempo.

El más "sangrón" de todos fue Luc Besson, quien se creyó mucho su papel de jurado del festival ya que aunque andaba en la calle, impedía a toda costa que lo fotografiaran.

Pedro Almodóvar fue de las estrellas quienes pasearon por la calle sin guardaespaldas, pero se arrepintió, porque tan pronto sus fans lo detectaron, se le fueron encima.

"¡Que no tendré un momento de paz!", gritaba el director español, "!que sí les doy autógrafos, pero uno por uno!".

Los que estuvieron fuera de lugar fueron los chicos...

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