El Informe Oppenheimer / López Obrador arranca con el pie izquierdo 15

AutorAndrés Oppenheimer

Tras pasar unos días en México poco antes de la toma de posesión del Presidente Andrés Manuel López Obrador el primero de diciembre, no puedo decir que encontré un clima de optimismo generalizado. Comparado con lo que vi en una visita anterior unas semanas antes, encontré un país que ha pasado de la esperanza al nerviosismo.

AMLO, quien será el primer Mandatario de izquierda de México en varias décadas, tomó varias medidas populistas en las últimas semanas que han sacudido la confianza de los inversionistas y han provocado que la bolsa mexicana caiga a su nivel más bajo en cuatro años y medio.

Incluso antes de asumir el cargo, el índice de aprobación de López Obrador cayó del 65 por ciento en agosto al 56 por ciento en noviembre, según una encuesta del diario El Universal.

Si bien la mayoría de los mexicanos quieren que cumpla sus promesas de campaña de erradicar la corrupción y gobernar para los pobres, cometió casi una docena de errores poco antes de su inauguración.

AMLO ha llevado a cabo dos polémicas "consultas ciudadanas" en que se le preguntó a la gente, entre otras cosas, si querían seguir adelante con el plan de construir un nuevo aeropuerto en la Ciudad de México. Pero las preguntas estaban diseñadas para avalar sus posturas anunciadas previamente, y la votación no fue supervisada por ninguna institución independiente.

El fin de semana pasado, visité uno de los lugares de elección en Guadalajara, y me fue difícil tomarlo muy en serio. Era una mesa improvisada en la calle en la avenida La Paz, atendida por media docena de jóvenes, sin observadores externos.

"Todos somos voluntarios", me dijo uno de ellos. Los críticos dicen que la votación fue llevada a cabo por activistas del partido político de AMLO, Morena.

Luego de uno de estos referendos, el futuro Presidente dijo que -tras recibir el respaldo de los ciudadanos- detendrá la construcción del nuevo aeropuerto de Ciudad de México, uno de los principales proyectos del país, estimado en 13 mil millones.

El problema es que detener las obras de Texcoco implica dejar sin efecto contratos con muchas empresas, y dejar en el aire a inversionistas que habían comprado 6 mil millones en bonos del aeropuerto. Los analistas económicos concluyeron casi unánimemente que AMLO no estaba respetando las reglas de...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR