El Informe Oppenheimer / Nicaragua y Bolivia: ¿dictaduras institucionales?

AutorAndrés Oppenheimer

Mientras todos observamos como Venezuela se ha convertido en una dictadura, se ha prestado poca atención a la desaparición en cámara lenta de la democracia en otros dos países: Nicaragua y Bolivia. Si siguen así, estas naciones bien podrían pasar a ser llamadas "dictaduras emergentes" de América Latina.

La gradual erosión de las libertades en Nicaragua y Bolivia me vino a la mente cuando entrevistaba hace pocos días a Sergio Ramírez, el escritor nicaragüense y ex vicepresidente sandinista que muy merecidamente acaba de ganar el codiciado premio Cervantes de Literatura, considerado por muchos como un premio Nobel del mundo de habla hispana.

Ramírez, a quien conozco desde sus días en el Gobierno en la década de 1980, rompió filas con el ex líder sandinista y actual Presidente Daniel Ortega a principios de los años 90.

En 1996, Ramírez se postuló para Presidente como líder de un partido de izquierda democrático que fundó, y luego de perder esa elección, abandonó la vida política para dedicarse de lleno a la escritura y el periodismo.

Tras convertirse en el primer escritor centroamericano en ganar el premio Cervantes, Ramírez recibió llamadas de felicitación de todo el mundo, y la noticia fue celebrada por muchos en Nicaragua. Pero no hubo un llamado de felicitación de Ortega, ni reconocimiento alguno de su Gobierno.

Cuando le pregunté a Ramírez cómo describiría políticamente a Nicaragua, respondió que "no es una democracia". También criticó duramente al régimen de Venezuela, señalando que su Presidente, Nicolás Maduro, está tratando de "despoblar el país de todos los líderes de la Oposición" para quedarse con poderes absolutos.

Pero Ramírez me dijo que, desafortunadamente, "casi nadie se ocupa de lo que ocurre en Nicaragua". El país ha celebrado recientemente elecciones municipales, en las que el régimen de Ortega ganó fraudulentamente a todos menos 15 de los 155 municipios en juego, y no hubo protestas internacionales al respecto, dijo.

La Organización de los Estados Americanos (OEA) respaldó estas elecciones municipales, a pesar de que fueron supervisadas por "un tribunal electoral sin ninguna legitimidad", me dijo Ramírez. Añadió que "por eso veo a la OEA como un tanto esquizofrénica: mientras tiene una crítica muy fuerte para la situación en Venezuela, en Nicaragua lo que hace es venir a dar una bendición".

Preguntado al respecto, un alto funcionario de la OEA me señaló que "mientras las recientes elecciones municipales en Nicaragua...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR