Entrevista/ Javier Zúñiga/ El reto de amnistía
| Autor | Jesús Acosta |
REFORMA/Gran Bretaña
LONDRES.- "La impunidad ya no es absoluta y quienes violan los derechos humanos o cometen crímenes de guerra pueden ser castigados", advirtió Amnistía Internacional (AI) en vísperas de la publicación de su Informe Anual.
En entrevista con REFORMA, el Director del Programa América dentro de AI, Javier Zúñiga, aseguró que los informes que publica el organismo denominados "reflectores sobre los Gobiernos" son cada vez menos ignorados y representan un instrumento de presión en manos de la sociedad para hacer justicia. "Hemos denunciado, hemos atendido a las víctimas. Nuestro reto ahora es lograr que se castigue a los responsables", afirmó Zúñiga, quien ha trabajado por 22 años como director regional de la ONG.
"En América Latina y en el mundo muy pocos de los culpables han sido juzgados y sentenciados, poquísimos...En Uruguay, en Argentina, en Chile, fuera de un puñado de personas, los asesinos andan sueltos. Eso es un reto", agregó.
Sin embargo, Zúñiga señaló que el caso Pinochet ha alentado la confianza de la opinión pública en el trabajo de denuncia y de alegato jurídico contra los violadores ya que demostró que "la impunidad ya no es absoluta".
La organización defensora de derechos humanos presentará mañana su Informe Anual. Para Zúñiga representa un momento de interpelación para los Gobiernos. "Los países reaccionan rápidamente, algunas veces de forma inteligente en la medida en que dicen 'Ah, vamos a estudiar con cuidado lo que dice Amnistía Internacional, y si hay alguna cosa la vamos a remediar'. Mientras que otros expresan inmediatamente su rechazo", afirma.
Según Zúñiga, prácticamente "ningún Gobierno desestima los informes de la organización. Ni siquiera la poderosa Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) lo hace, tal y como lo reiteran las conclusiones del reporte que acusa a la Alianza de crímenes de guerra en Yugoslavia".
Y añade: "En un mundo en el cual las armas se han vuelto tan sofisticadas, tan letales, las reglas de la guerra empiezan a volverse muy elásticas. Los bombardeos de la OTAN, que afectaron a civiles, tuvieron un fin político y no sólo militar...Los ataques a blancos civiles fueron deliberados. No hay duda", insistió Zúñiga al rechazar que la posición de AI sea sólo de tipo moral.
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