José Luis Morán López / Los Premios Nobel 2007
| Autor | José Luis Morán López |
Los pasados días se dieron a conocer los Premios Nobel de física y química. En física lo comparten el francés Albert Fert, de la Universidad del Sur de París y el alemán Peter Gruenberg, del Centro Nuclear de Juelich. El de química fue para el alemán Gerhard Ertl, quien fue director del Instituto Fritz Haber de Berlín.
Estos reconocimientos, aunque en áreas diferentes, comparten el que se premian descubrimientos de fenómenos que tienen lugar en las superficies de sólidos.
La física y química de superficies tuvo auge en los setenta. Uno de los problemas principales que retardaron esas investigaciones fue que no se podían aislar los materiales en las cámaras hechas ex profeso. Los gases que de forma natural se encontraban en las cámaras no se podían extraer completamente y siempre quedaba un número importante de átomos de oxígeno, nitrógeno o de óxidos de carbono, que interferían con el fenómeno. A la extracción de los gases se le conoce comúnmente como técnica de vacío.
Fue hasta esa época cuando se pudieron obtener vacíos suficientemente altos, de manera que las propiedades que se medían eran las de la superficie del material, en ausencia o presencia de gases, que deliberadamente se inyectaban para estudiar la interacción de éstos con los átomos de la superficie.
Al lograr vacíos altos, se pudieron fabricar en forma controlada películas de una o varias capas atómicas de una gran diversidad de materiales, al depositar los átomos sobre un sustrato. Esto permitió a su vez que se pudieran estudiar las propiedades electrónicas, magnéticas, ópticas, de absorción de gases, etc., de la región superficial de las películas. A este campo se le reconoce como precursor de la nanociencia.
En este contexto se circunscriben las investigaciones que este año reciben el Nobel. En el de física, se premió el descubrimiento de una propiedad magnética conocida como magnetorresistencia gigante. Su aplicación tecnológica ha revolucionado las técnicas para leer la información almacenada en los discos duros o en los aparatos diminutos reproductores de música.
La miniaturización de las computadoras se debe a que ha sido posible generar discos duros cada vez más pequeños y con una gran capacidad de almacenamiento. La información que en las computadoras de los setenta ocupaba cuartos enteros, ahora ocupa el espacio del tamaño de un cuaderno, y se pueden grabar y reproducir cientos de canciones en aparatos reproductores de música del tamaño de una caja de cerillos.
La...
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