Juan Enríquez Cabot / Sueños...
| Autor | Juan Enríquez Cabot |
Ciertamente hay mujeres que inspiran sueños. De todo tipo. El otro día me tocó convivir con una de ellas... Llegó a una pequeña reunión de quienes invierten en alta tecnología y alto riesgo (Venture Capital) una extraordinaria dama, Susan Hockfield, la presidenta de MIT.
A mitad de los brutales recortes en el presupuesto de Estados Unidos, con guerras por todos lados, en medio de una crisis marca Acme en la educación primaria, y de desempleo récord, vaya que había de qué quejarse, de qué preocuparse. Pero esto no fue el mensaje de Susan. Al contrario, llegó llena de tranquila energía y de manera lógica, modesta y amable nos explicó que quería lograr cuatro cosas, que tenía cuatro sueños.
Muchos soñadores andan en las nubes. La de Susan es un tanto distinta. Sueña con una nube segura. En la medida en que estamos generando una cantidad sin precedente de datos, información, ideas, se vuelve imposible almacenar todo esto, aun en las computadoras más grandes del planeta. Ni se diga en tu laptop. Esto implica que algunas de las cosas más triviales e importantes que poseemos no residan en un centro de datos rodeado de alambre de púas, protegido por kaibiles. No, estos datos flotan de manera distribuida y se intercambian entre enormes cantidades de máquinas. Por lo que cuando solicitas información sobre el novio de Ricky Martin, tendencias financieras o cambio climático, la información que flota se recaba de millones de sitios, se concentra, y entra a tu computadora.
Por ser un sistema distribuido hay enorme redundancia. Aun bajo un gobierno autoritario es requete difícil bloquear, prohibir, censurar, ofuscar toda información. Mientras exista electricidad y algún acceso a la red, se requieren miles de millones para siquiera empezar, ni se diga mantener, un bloqueo eficaz de información.
Pero precisamente por la amplia distribución de datos, la nube no es muy segura que digamos. Es cada vez más fácil perder información, filtrarla, esparcirla. (Véase por ejemplo WikiLeaks...) Hay quienes se especializan en robar tus datos. Y hay información crucial que se pierde o se corrompe. El sueño de Susan es corregir esto sin revertir a censura o centralización. No es sueño trivial. Requiere rediseñar la red, el cómputo, el cómo codificamos, distribuimos, engendramos y consumimos información.
Claro, no todo es cómputo y no todo es virtual. Por lo que el segundo sueño de la Hockfield es que se apruebe una vacuna contra el SIDA. Esto tendría no solo un enorme...
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