Carta/ Legislación global

Sin duda la genética llegó para quedarse, su desarrollo es parte de la evolución del conocimiento humano.

No podemos satanizar a la genética, ni a los científicos que la practican, la genética es una rama del conocimiento humano que puede utilizarse para bien o para mal, al igual que el conocimiento y manipulación de la energía atómica se puede utilizar para hacer una bomba o para producir electricidad, lo que sí se debe hacer con suma urgencia es legislarla.

El problema es grande cuando vemos que la tecnología avanza a la velocidad del cohete y la promulgación de nuevas leyes a paso de tortuga.

Las grandes corporaciones, dueñas de patentes biotecnológicas, minimizan los riesgos de consumir alimentos transgénicos o de alimentarnos con animales manipulados genéticamente, ya que sus intereses son concluir las investigaciones lo más rápido posible para ganar la patente y con ello miles de millones de dólares.

Solamente la unión entre Gobiernos de varios países poderosos, aunada a la creación de leyes como se hizo en la Unión Europea, serían capaces de contrarrestar el poder económico de estas corporaciones transnacionales de biotecnología.

Hay estudios realizados por científicos europeos que llegaron a la conclusión de que el consumo de alimentos transgénicos es peligroso...

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