La República de las Letras
| Autor | Humberto Musacchio |
Los 140 años del Casino Español
El Casino español echó la casa por la ventana para celebrar sus 140 años de vida y el primer centenario de su sede, ubicada en la calle Isabel la Católica, uno de los inmuebles más bellos de la capital. En el salón principal del recinto se sirvió un banquete al que asistió como invitado de honor el Presidente Vicente Fox, quien fue muy celebrado cuando improvisó e hizo referencia a los orígenes de su familia materna -al abuelo Vicente-, a las amistades de sangre ibérica y a su paso por la Liga Española de Futbol, "donde siempre ganábamos", dijo ante un público regocijado por estas manifestaciones de identidad. Fox leyó antes un discurso que fue escuchado respetuosamente, aunque no era el más apropiado para la ocasión. En el texto se hacía referencia a Benito Juárez y Lázaro Cárdenas, personajes que no encajan con la ideología hegemónica de la institución anfitriona, donde en los años de la Guerra Civil española se agrupaban las familias que simpatizaban más ardientemente con el bando nacionalista. De ahí que sonara extraño el aplauso que al oír el nombre de Cárdenas comenzara el doctor Fernando Serrano Migallón, quien fue seguido por apenas una docena de comensales. Al final, se entregó a los presentes una medalla conmemorativa y un libro de gran formato con la historia de este Casino, donde, para tranquilidad de las almas buenas, no se cruzan apuestas.
Un libro digno de Héctor García
Editorial Turner ya abrió oficinas en la Ciudad de México. Entre los libros que son su carta de presentación está uno de gran formato, Museo Nacional de Antropología, con textos de especialistas sobre las diversas culturas que muestra la institución. El otro, excelente, está dedicado a Héctor García, uno de los grandes maestros de la fotografía de la segunda mitad del siglo 20. Hondamente mexicano por sus temas y su manera de captarlos, Héctor tiene una obra para admirarse en cualquier lugar. Hay en sus tomas un afán militante de captar la vida plebeya, sus elegancias y momentos gozosos, los esfuerzos, las tragedias y querellas de talante proletario. No casualmente, en las primeras páginas de este libro figuran fotos emblemáticas de este autor que tienen como protagonistas a los niños: la imagen celebérrima del chamaco cañero, la otra, publicada en varios países, del infante metido en un nicho de concreto o la de una mocosa campechana al momento de travesar un arco de piedra en cruz. Ya era urgente un libro que presentara sin...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba