Lugares disponibles ¡todo el año!

AutorCarmen González

¿Quién dijo que verano es sinónimo de playa, e invierno de nieve? Afortunadamente para los turistas, hay destinos que ofrecen un inimaginable abanico de opciones de esparcimiento en ambas estaciones.

Las condiciones climáticas, lejos de ser un obstáculo, se convierten en los mejores aliados de unas vacaciones perfectamente planeadas; es cuestión de definir lo que se quiere hacer durante el viaje, y la naturaleza proveerá el escenario perfecto.

Áreas meridionales

En el hemisferio sur del planeta, del Ecuador hacia abajo, las estaciones se viven a la inversa, de manera que, mientras en México el termómetro ronda los 20 grados centígrados, cuando es otoño, en lugares como Bariloche, en Argentina, ese mismo lapso es ideal para ver renacer a la naturaleza, pues comienza la primavera.

En esta ciudad, durante los meses de junio, julio y agosto, el cerro Campanario se convierte en una simpática estación de esquí que cuenta con pistas para todos los niveles, desde principiantes hasta expertos. Es también una buena temporada para pasar por las múltiples chocolaterías de la región y abastecerse del preciado alimento que elevará las calorías de los paseantes.

En verano, el mismo cerro cede sus funciones de estación de esquí a las de mirador, y en el lago Nahuel Huapi, que otrora luciera congelado, se pasea en bote para llegar hasta la isla Victoria, la más grande del lago, y así, apreciar el verdor del entorno.

www.bariloche.com

Entre nieve y flores

La pequeña ciudad de Salt Lake City, en Utah, Estados Unidos, tiene apenas 2 millones de habitantes, pero todo el año está llena de turistas, pues a tan sólo 30 minutos de su centro hay montañas espectaculares que atraen como imán a locales y visitantes.

En verano, los parques naturales Snowbird, Big Cottonwood y Solitude ofrecen actividades como caminata y ciclismo de montaña.

La ciudad debe su nombre a un lago que ahí yace, y que es el segundo más salado del mundo, después del Mar Muerto, en Israel. En verano es posible flotar en sus aguas, pues la salinidad no permite que los cuerpos se hundan.

Otra de las maravillas a disfrutar en primavera o verano es el cañón Big Cottonwood, perfecto para el ciclismo de montaña.

En invierno, su impresionante infraestructura de hoteles y resorts de esquí, convirtió a esta ciudad en anfitriona de los Juegos Olímpicos de Invierno en 2002. Park City, Deer Valley y The Canyons son los puntos obligados que todo viajero con intenciones de deslizarse sobre la nieve debe...

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