Lujo exorbitante

AutorRodolfo G. Zubieta

Mansiones, autos último modelo, ropa de diseñador y joyas carísimas son lujos mínimos en comparación con la nueva excentricidad de los famosos: viajar al espacio.

Desde que en 2001 el empresario estadounidense Dennis Tito se convirtió en el primer turista en órbita, al parecer, tras pagar 20 millones de dólares, figuras como Justin Bieber y Katy Perry se emocionaron con la idea de ser astronautas.

Pero fue cuando el magnate británico Richard Branson lanzó Virgin Galactic, en 2004, que las celebridades vieron que dejar la tierra era una posibilidad real.

La empresa anunció a finales del año pasado el arranque de sus actividades en 2015, y Lady Gaga fue la primera famosa en apuntarse y sorprendió a todos con su idea de dar un show en el espacio.

"Honestamente, no puedo esperar. Me muero de ganas por diseñar el concierto", dijo Gaga a Harper's Bazaar en marzo. ¿El precio de su boleto? Lo patrocinará Branson.

"Va a ser la cosa más emocionante que haya hecho en mi vida. Tengo la sensación de que ella diseñará una ropa superadecuada para la ocasión", bromeó el millonario.

De inmediato, otros famosos se sumaron a la lista de espera de Virgin, como Bieber y su mánager; Ashton Kutcher y el científico Stephen Hawking, según el Daily News.

"No creo que sobrevivamos otros mil años sin escapar de nuestro frágil planeta, invito a la gente a que se interese en el espacio. Yo ya comencé mi entrenamiento", señaló el astrofísico al New York Daily.

Branson le regaló el viaje a Hawking, pero conocidos como Brad Pitt, Angelina Jolie, Russell Brand, Katy Perry, Sigourney Weaver y Bryan Singer ya pagaron los 200 mil dólares que cuesta cada boleto espacial.

"Viajar al espacio no parece buena idea debido a mi pasado. Hace 10 años era drogadicto: si quería viajar al espacio, lo tenía que hacer con crack", bromeó Brand, cuyo boleto lo pagó su entonces esposa, Perry.

La situación de los protagonistas de Titanic, Kate Winslet y Leonardo DiCaprio, es distinta: la actriz tendrá asientos gratis para toda su familia en uno de los vuelos gracias a que su marido, Ned Rocknroll, es sobrino de Branson.

Y el boleto de DiCaprio fue resultado de una subasta altruista realizada en el pasado Festival de Cannes, donde, por 1.5 millones de dólares, una persona consiguió ser el futuro...

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