Se mantiene vivo
| Autor | Alan Miranda |
Tras las cancelaciones del Tren de Alta Velocidad México-Querétaro y el Transpeninsular, a consecuencia del recorte presupuestal de enero de 2015, el Tren Interurbano México-Toluca es el único sobreviviente de los grandes proyectos ferroviarios de la presente Administración.
La inversión total para este proyecto asciende a 41 mil millones de pesos y su construcción arrancó oficialmente el 7 de julio del 2014.
Aquel día, Gerardo Ruiz Esparza, titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), dio el banderazo a la maquinaria que trabajaría en esta obra y en la ampliación de la autopista México-Toluca en el municipio de Ocoyoacac, Estado de México.
Más de un año después, a mediados de agosto de 2015, el avance físico de la obra era de apenas 11 por ciento, de acuerdo con el titular de la SCT.
Esto significa que las compañías contratadas para la construcción deberán acelerar el paso, pues tienen que concluir el 89 por ciento de la infraestructura restante antes de octubre del 2017, es decir, en dos años y tres meses.
Para esas fechas, está programado el arranque de las pruebas preoperativas, es decir, los recorridos de los vagones sin pasajeros para garantizar que la operación es completamente segura.
La dependencia federal explicó que el arranque de operaciones está programado para el 1 de marzo del 2018, nueve meses antes de que concluya la actual administración.
TRES FRENTES
El trazo completo está dividido en tres frentes de obra, con niveles de complejidad distintos.
El primero mide 36.15 kilómetros y abarca principalmente la zona urbana de Toluca, aunque también una parte del ascenso hacia la Sierra de las Cruces, hasta La Marquesa.
Tiene algunos tramos a nivel, pero también varios kilómetros de viaductos elevados. En él, estará la terminal de Zinacantepec, al poniente de la zona metropolitana de Toluca, y las estaciones intermedias de Cristóbal Colón (cerca de la central de autobuses de la capital mexiquense), Metepec (cercana al Aeropuerto Internacional Adolfo López Mateos) y Lerma.
Fue la primera en ser adjudicada, en junio del 2014, al consorcio formado por la empresa mexicana La Peninsular y Constructora de Proyectos Viales de México, una subsidiaria del español Grupo OHL, por un monto de 10 mil 148 millones de pesos IVA incluido.
También fue la primera sobre la que se iniciaron obras, por lo que los trabajos van más avanzados ahí, con casi 11 por ciento.
El segundo tramo es de apenas 4.6 kilómetros, pero es el de mayor...
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