Manuel J. Jáuregui / Jiddu y el aborto

AutorManuel J. Jáuregui

Meterse a discutir el tema de la despenalización del aborto es como tirarse a una alberca llena de pirañas: las posibilidades de salir ileso tras el intento son escasas.

Ello no impide, sin embargo, que hagamos hoy algunas observaciones sobre el proceso que para este fin llevó a cabo la Asamblea capitalina.

Primero que nada es preciso hacer notar la total incongruencia de algunos perredistas, quienes cuando ellos son mayoría (como en la Asamblea) les parece de lo más democrático la imposición de sus criterios.

Pero cuando son minoría, como en el Congreso, entonces se rasgan las vestiduras y desgañitan en ira diciéndose "víctimas del mayoriteo".

Salta a la vista que si una posición es cierta y vera, entonces la otra es falaz. Se vale escoger lado, pero lo que no se vale es abrazar simultáneamente ambas vertientes de un mismo argumento.

Entonces, con la despenalización del aborto y sin discutir la procedencia o improcedencia de esta medida, salta a la vista que un grupo transitoriamente mayoritario ha tomado una decisión legislativa que lesiona creencias e ideas de otros grupos que no coinciden con las motivaciones y consecuencias de este cambio legislativo.

Y aquí nos parece oportuno introducir a un gran pensador, un teósofo de primera magnitud premiado por la ONU en 1984 con la Medalla de la Paz: Jiddu Krishnamurti.

Este pensador, de origen indio, en sus diferentes escritos y conferencias pretendió desarrollar un pensamiento incluyente que abrazara todas las filosofías y creencias: una especie de compendio de la moral humana universal.

En uno de sus libros, "Reflexiones Sobre el Ego", Krishnamurti escribió lo siguiente: "Para la mayoría de nosotros, los problemas de la vida no son muy serios y queremos respuestas hechas. No deseamos ahondar en el problema, examinarlo por completo, plenamente y comprender todo su significado; queremos que se nos diga la respuesta, y cuanto más gratificante sea, más rápido la aceptaremos. Cuando se nos obliga a pensar sobre un problema y tenemos que indagar en él, nuestras mentes se rebelan porque no estamos acostumbrados a investigar.

"Al considerar estas cuestiones, si se limitan a esperar de mí una...

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