Manuel J. Jáuregui / El que se sepa
| Autor | Manuel J. Jáuregui |
Vergüenza no es hacer chapuza; vergüenza es hacer chapuza ¡y que se sepa!
Evitaremos hacerle al montonero y volcarnos con críticas (del todo merecidas) encima del señor este Jaime Heliodoro Rodríguez Calderón, que tanto desprestigio ha hecho caer sobre nuestro antes grandioso Nuevo León.
Sólo lamentaremos hoy el ocaso de un Estado que en otras épocas fue el atalaya nacional, el Estado de vanguardia, admira-do en todo México: ejemplo nacional por ser el portador del estandarte de los valores de la más pura democracia y que ejerció tanto desde el sector privado con gente que enfrentó al sistema de la talla de un don Andrés Marcelo Sada que defendía principios y no intereses, o desde el sector público con Gobernadores pundonorosos y rectos capaces de enfrentarse a la todopoderosa Presidencia echeverrista defendiendo la autonomía universitaria como Eduardo A. Elizondo, o Gobiernos pulcros y destacados como lo fue el de Fernando Canales.
Argumentamos hoy, estimados lectores, que el DEBASAMIENTO de nuestra imagen, de nuestro orgullo, de nuestro standing y valía como Estado progresista, ejemplar, es la principal VÍCTIMA de esta chusca vergüenza nacional que nos ha hecho pasar el señor Rodríguez Calderón.
Nos pesa mucho, pero mucho en nuestro ánimo, estimados amigos lectores, el saber que esta vergüenza que nos han hecho pasar es una que tiene muchos padres, no sólo Jaime Heliodoro Rodríguez Calderón.
Sostenemos, y seguiremos sosteniendo mientras Dios nos preste vida, que Nuevo León, por su tradición, por sus raíces mismas, debe de ser siempre una sociedad que por su conducción, por su integración social, por su actitud y valores colectivos DESTAQUE por encima de los demás.
Nuevo León debe equipararse no a sus hermanos Estados de la República, sino a los Estados más avanzados del mundo, pues tiene todo para ser considerado así.
Así era antes y así debe ser siempre.
Si es Nuevo León ya el número uno en educación, en salud, en capacidad empresarial, en el ejercicio de la libertad de opinión, en filantropía, en liderazgo social; lo tiene que ser también en otros aspectos, tales como en gobernancia.
Ser el hazmerreír nacional, les proponemos amigos lectores, dista mucho de ser la posición que ante propios y extraños deba mostrar este nuestro Estado.
Estado que, les recordamos, fue uno de los PRIMEROS a nivel nacional en tener un Alcalde (Humberto Junco Voigt en San Pedro) y un Gobernador (Fernando Canales) de Oposición.
Y fue, previamente, el primer y...
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