Manuel J. Jáuregui / ¿Quién sigue?

AutorManuel J. Jáuregui

Ha quedado clarísimo, con sus declaraciones de ayer, que en el Gobierno de la Cuarta Transumisión sólo el criterio del Presidente vale.

Le presentan un Plan Nacional de Desarrollo basado en ciencia, evidencia y sólida experiencia y lo rechaza porque él inventó uno mejor.

A su hoy Secretario de Hacienda, siendo Subsecretario lo contradijo públicamente en cuando menos dos ocasiones.

En suma, salta a la vista que es difícil, por no decir que imposible, trabajar para un jefe así, uno que adicional a todas sus evidentes excentricidades y carencia de metodología científica se cree la reencarnación de Benito Juárez, a quien, dijo, le renunciaron 30 ministros y como quiera venció a los franceses.

Lástima que eso fue en 1867, que Juárez traía por aquellos años el despacho arriba de una mula en su fuga hacia El Paso, Texas, y hoy estamos en 2019, otro planeta, otras circunstancias muy, muy diferentes, en las que se requiere de un Presidente moderno con un Gabinete experto, eficaz, que pueda operar con autonomía y ejecutividad.

En su mañanera de ayer, el Presidente casi casi invitó a otros de sus colaboradores a seguir el ejemplo de Urzúa y de Germán Martínez: le da igual quién lo acompaña y se engaña a sí mismo afirmando y reafirmando que todo el campo es orégano (ayer mismo mientras él decía que el Peso se fortalecía en los mercados, éste se chorreaba a 19.55 y va de "fly" a volarse la barda de los 20).

Queda entendido que ello se debe a que él, Juárez reencarnado, no necesita a nadie y él -y sólo él- sabe qué hay que hacer y cómo hacerlo.

Se cruzan apuestas ya sobre quiénes serán los siguientes en aventarle el instrumento a nuestra versión del flautista de Hamelin.

Cantidad de funcionarios hay subapreciados, subutilizados, que han sido ninguneados, menospreciados e ignorados por el Presidente.

Por ejemplo: don Miguel Torruco Marqués, Secretario de Turismo, a quien han dejado sin presupuesto y a quien ya le dijeron que el sargazo que ahoga las playas en Cancún "no tiene importancia".

Este experto en turismo y hotelería con posgrado de Cornell ninguna necesidad tiene de hacerle a la esferita (estar de adorno) cuando el Tlatoani lo ignora y demuestra cero interés por promover el turismo: ahí está el olímpico desdén con el que canceló la 4T el Gran Premio de México y otros eventos que le brindan brillo a nuestra Patria en el extranjero y que generan una importante derrama económica.

Otro caso del uso de la aplanadora chicharronera es la abogada Olga...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR