Marca djembé el ritmo

AutorLaura Castellanos

El sonido viril del djembé sonó por primera vez en México en 1987. El rey de los tambores africanos habló a través de las manos de Guillaume Podget y su lenguaje milenario hizo que varios jóvenes mexicanos se decidieran a seguir "el buen camino del tambor".

"Es muy loco ver cómo la semillita que sembré creció tan rápido y tan grande; fue el azar del destino", dice quien detonó el intercambio cultural con Guinea -considerada la cuna del djembé-, fundó el primer grupo de percusión africana en México, Tibwa, e instauró en el centro de Coyoacán el reinado capitalino del tambor africano.

Parte de la popularidad creciente de estos ritmos queda explicada en la experiencia de Marina Vera, bailarina del grupo Ire Ona. "Para mí fue un descubrimiento sentir cómo late mi corazón con la percusión y la danza; no lo considero una moda sino una forma de vida que además me da paz, trabajo y mucho conocimiento de dónde vengo, de mi raíz, aunque no tenga ascendencia negra".

En México existen cerca de 40 grupos de percusiones que han incorporado el djembé, pero en opinión de Eduardo Garavito, uno de los alumnos de Podget, sólo una decena lo hace de manera profesional, llegando a estudiar incluso con maestros de Guinea, mientras que el resto lo toca sólo por entretenimiento.

Desde el 2001, jóvenes mexicanos comenzaron a aventurarse a Guinea en busca del conocimiento del tambor. Garavito dice que, además de la pobreza extrema del país africano, la estancia suele estar llena de peligros.

"Arriesgamos nuestra vida al ir, porque Guinea no es un país turístico, está bajo dictadura militar, hay toque de queda, no existe una Embajada de México y, si alguien te desaparece, ya valiste".

Percusión masculina

Los orígenes del djembé se remontan al país mandinga, en el África Occidental, y tradicionalmente ha sido una percusión masculina. Antiguamente fue utilizado tanto en rituales como bautizos y bodas como en peleas; inmersos en sus ritmos y danza frenéticos, explica Garavito, los hombres llegaron a combatir hasta la muerte.

Actualmente, el djembé se utiliza tanto en ceremonias rituales como profanas, acompaña desde las actividades de siembra y cosecha hasta las fiestas.

"En Guinea", refiere Podget, "hay músicos profesionales como los griots que tocan para personajes importantes a cambio de dinero o comida, pero también un campesino puede ser músico y tocar para animar a la gente mientras trabaja la tierra".

El djembé vivió un boom internacional a finales de los 80, tras...

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