Milagroso triunfo

AutorEdgar Contreras

La Naranja Mecánica engañó a su estilo, y le costó muy caro. Argentina apostó a no perder y terminó ganando.

De ser una de las escuelas futbolísticas más atractivas, la del "futbol total", Holanda renunció a ese estilo, supuestamente porque con él no lograban ser campeones del mundo, y volvieron a quedarse en la orilla.

Y es que en la Semifinal contra Argentina, el futbol le cobró factura.

La Oranje le dio la espalda al balón y éste se desquitó en penales, con las fallas de Ron Vlaar y Wesley Sneijder y la consagración de Sergio Romero, el arquero albiceleste.

Una Argentina con poco futbol, con escaso aporte de Leo Messi, pero fiel a su estilo, por feo que fuera, alcanzó la Final de Brasil 2014.

La Oranje, tan criticada en 2010 por un subcampeonato forjado con juego rudo, ahora jugó al contragolpe y hasta a los clavados de Robben con tal de ganar.

Sneijder advirtió que estaban hartos de jugar bien y perder. Dijo a los críticos que si ganaban el torneo quién les cuestionaría las...

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