Minimalismo: Estética de lo indispensable
| Autor | Andrea Martínez de la Vega |
Las obras que inspiraron en 1965 al filósofo Richard Wollheim a escribir un ensayo en el que acuñaría el término "minimalismo" no fueron arquitectónicas, sino artísticas, lo que no impide que, a poco más de medio siglo de distancia, algunas características de aquellas piezas estén presentes en construcciones actuales.
En esta corriente de diseño se ha superado al color blanco como único componente de la paleta cromática y, con el paso del tiempo, se han incorporado otros materiales y tonalidades, manteniendo la estética que busca reducir al mínimo los medios de expresión.
Aspectos como la ausencia de ornamentos, el protagonismo de las fachadas, la abstracción de las formas y una geometría elemental y rectilínea se suman al uso literal del concreto y la madera, que dan calidez a los ambientes de estas tres propuestas residenciales.
ARQUETIPO DE SIMPLICIDAD
· CASA EN LEIRIA
· Aires Mateus
· Leiria, Portugal
Si se pide a un niño que dibuje una casa, probablemente el resultado sea una imagen con formas similares al volumen de planta cuadrada y techo a dos aguas de esta residencia creada en Portugal por el arquitecto Manuel Aires Mateus.
La prevalencia del blanco en todos los planos que componen su fachada es uno de los aspectos que la acercan al minimalismo, a esto se añaden la sobria paleta de materiales que presume en su interior, lo rectilíneo de su diseño y la austeridad en cuanto a ornamentos.
Esto fue posible, según el creativo, gracias a los sistemas modernos de impermeabilización, los cuales permitieron el poco convencional acabado de yeso pintado que se usó en el techo.
Ubicada en un punto elevado sobre el nivel de la calle y con vistas de la ciudad portuguesa de Leiria, a la cual debe su nombre, se decidió que el exterior de la residencia se presentara como un volumen sólido y definido.
Sin embargo, los alcances de la propuesta no se limitan por los muros planos y uniformes, carentes de ventanas u otros elementos, pues están sumergidos bajo el suelo.
"Las zonas privadas están al nivel de la calle, debajo de la tierra, alrededor de un patio central y con cuartos que se abren a patios subterráneos privados con un ambiente íntimo", explicó el artífice.
"Mientras, los espacios públicos están alrededor de un vacío por el que se cuela luz del exterior y que se abre en dirección al castillo en el centro de la ciudad".
Así, a pesar de que en primera instancia la edificación parece cerrarse sobre sí misma, permite la entrada del ambiente circundante a los espacios más íntimos e incluso se relaciona...
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