Modesto Suárez / 'Parche mal pegado'

AutorModesto Suárez

Para mí, el dictamen sobre pederastia es un parche mal pegado.

Sergio Salvador Aguirre Anguiano,

ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación

Uno de los casos más extraordinarios -por el poder de las personas en él involucradas y la situación tan vulnerable de las víctimas cuyos derechos fueron conculcados- que han llegado a la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha sido sin duda el de la periodista Lydia Cacho.

La génesis de este caso se encuentra en la investigación sobre redes de pederastia -abuso deshonesto con los niños- y de pornografía infantil publicada por Cacho en su libro Los demonios del Edén. En dicha obra, la autora señala al negociante Kamel Nacif como presunto pederasta, quien decidió denunciarla por calumnias y difamación. Aprehendida en Cancún y trasladada a Puebla en un viaje de unas 20 horas, Cacho fue torturada psicológicamente. La grabación de la infame conversación sostenida entre el gobernador del estado de Puebla, Mario Marín Torres, y Kamel Nacif, difundida ampliamente a través de los medios de comunicación, dio sustento a la tesis de una confabulación de ambos personajes en contra de esta periodista.

En ejercicio de la facultad prevista en el párrafo segundo del artículo 97 de la Constitución, la Suprema Corte de Justicia nombró una comisión investigadora, encabezada por el ministro Juan N. Silva Meza, para determinar si había habido una violación grave a las garantías individuales de Lydia Cacho. La intervención de la Suprema Corte en el asunto Marín y Nacif versus Cacho generó muchas expectativas. Un poder independiente, supremo en términos de impartición de justicia, tomaba en sus manos un caso en el cual estaban en juego la integridad física y emocional de menores de edad, el federalismo y el respeto a las garantías individuales, entre ellas la libertad de expresión. Existía la esperanza de obtener justicia para el débil y castigo para el poderoso. Sin embargo, la larga historia de expectativas fallidas a cargo del máximo tribunal de la nación pesó más que los derechos de los débiles. De entrada, mediante seis votos contra cuatro, el máximo tribunal excluyó la pederastia del dictamen preparado por el ministro Silva Meza, arrojando por la borda el origen del problema. La pederastia y la explotación infantil -afirmó el ministro Silva Meza, después de que la comisión investigadora recogiera el testimonio de un...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR