Del Mono Rhesus al hombre Transgénico

AutorArturo Barba Navarrete

Un grupo de investigadores del Centro de Investigación Regional en Primates de la Universidad de Ciencias de la Salud de Oregon, en Portland, Estados Unidos, encabezado por el doctor Gerald Schatten, reportó en la revista Science el nacimiento del primer mono transgénico, llamado ANDi por las siglas invertidas de "inserted DNA".

El mono rhesus ANDi no es el primer mamífero transgénico, pues otras especies ya han sido modificadas genéticamente como cerdos, vacas, ovejas, ratones y ratas, entre otros, pero es el primer miembro de la familia a la cual pertenece la especie humana: los primates.

Confirmando la interpretación darwiniana de la evolución, la ingeniería genética logrará pasar del mono al hombre transgénico, pues abre nuevas posibilidades científicas y tecnológicas de obtener, si no seres humanos transgénicos, sí muchos medicamentos, compuestos y órganos, en lo que ya varios investigadores de todo el mundo trabajan.

Un Gen, por Favor

El método de modificación genética se basa fundamentalmente en agregar a una célula reproductora de la madre de ANDi (oocito) un gen marcador o "reportero" llamado así por su función de indicar su ubicación y su estado, que es fácilmente identificable por ser el responsable de la producción de la proteína verde fluorescente (la proteína GFP, por sus siglas en inglés, proveniente de la medusa Aequorea victoria).

Con técnicas comúnmente utilizadas en la modificación genética, el grupo de investigadores de Oregon introdujo este gen a través de un vector, en este caso un virus, usado en terapia génica en humanos y que no tiene ningún efecto infeccioso.

Una vez que el virus fue cargado con la información genética del gen reportero, se introdujo a la célula, valiéndose en sus múltiples mecanismos de invasión, para posteriormente dejar la información genética en el ADN de la célula.

De esta manera, se transcribió el gen de la proteína verde fluorescente en la doble hélice del ADN del cromosoma de la célula madre.

Fueron modificados 224 huevos, que luego se fertilizaron por inyección con esperma del padre, produciendo 20 embriones. Se utilizaron métodos de inseminación artificial en hembras hormonalmente preparadas y se consiguieron cinco embarazos, de los cuales hubo tres nacimientos vivos, pero sólo ANDi demostró la integración transgénica de la proteína verde fluorescente.

"Podremos introducir, por ejemplo, un gen de Alzheimer, para acelerar el desarrollo de una vacuna contra esta enfermedad", dijo Gerald...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR