Negocios con visión humana

AutorMartha Herrera

Las empresas, como actor clave en un ecosistema social, debemos de estar conscientes de que lo que hacemos influye sobre la calidad de vida de los demás: empleados, clientes, comunidades en las que operamos, así como en el planeta.

Todos estamos concatenados y es nuestra forma de ser y hacer empresa la que nos permitirá ser ciudadanos proactivos en el mejoramiento de nuestro entorno.

Por lo anterior, es necesario ver el desarrollo humano como clave del crecimiento.

Si ponemos a las personas en el centro de la agenda, resulta más fácil actuar bajo el marco de la responsabilidad siendo conscientes de nuestro entorno y grupos de interés, lo que nos permite gerenciar mejor nuestros impactos positivos y negativos y, al mismo tiempo, crear valor y progreso.

El rol que, como compañías, se emprende en este ecosistema ha evolucionado demandando con más contundencia regirse por un propósito, el cual permita trascender en el tiempo y contribuir al desarrollo de los miembros de la sociedad.

Hoy en día, el creciente activismo social es aún más exigente con los productos y servicios: son más las personas que esperan que las empresas entiendan y escuchen sus expectativas y las interioricen en la estrategia de negocio.

Es por ello que las empresas no podemos estar separadas del desarrollo social, y debemos enfocar nuestros esfuerzos a crear valor compartido.

Para ello, es necesario compartir nuestro conocimiento, incentivar la innovación y, sobre todo, crear modelos...

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