Una nueva era

Del Zócalo de la Ciudad de México a la Plaza de Tiananmen en Beijing; de Times Square, en Nueva York, hasta la bahía de Sidney, en Australia; de la Avenida 9 de Julio, de Buenos Aires a la Plaza Roja, de Moscú; de Ciudad del Cabo a Berlín; de Londres a Nueva Delhi; de París a Río de Janeiro... miles de millones de seres humanos se dieron cita en los principales lugares públicos para celebrar con extraordinaria algarabía una nueva era: la llegada del Año 2000, el Siglo 21 y el Tercer Milenio.

Más allá de las polémicas, de las creencias religiosas, e incluso de las diferencias culturales e ideológicas, en las concentraciones multitudinarias, en el calor de los hogares, en los puestos de trabajo, en los anónimos lugares, a medida que los husos horarios recibían el inicio del 1 de enero surgía un ambiente especial al que nadie se pudo sustraer, inclusive aquellos que no consideran que este día llega el nuevo siglo.

Sobre las grandes urbes, sobrevolaba el fantasma...

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