Una nueva luz

AutorAlicia Ortíz

Acodado en los barandales del yate en que disfrutaba de unas vacaciones con su familia, el rostro de Alejandro Zatirka pasó repentinamente del placer a la angustia: a través del grueso cristal de sus anteojos pudo ver como una niña caía al mar y, con graves dificultades, intentaba no dejarse tragar por las olas.

No lo pensó. Se lanzó al agua y con él, sus lentes cayeron a lo profundo del mar, sumiéndolo en la impotencia de no saber hacia dónde dirigirse ni cómo ayudar a una pequeña que había quedado fuera del alcance de su disminuida vista.

La dramática experiencia le hizo tomar una decisión a la que se había rehusado: operarse los ojos a través de una técnica que, hasta hace poco, era todavía considerada como estética pero que, a lo largo del tiempo, se ha demostrado que reporta muchos más beneficios que los derivados de liberar al rostro del pesado yugo de los anteojos, o de las incomodidades del uso de los lentes de contacto.

Mejor autoestima y seguridad

Recuperar la agudeza visual reporta una serie de beneficios

"El primero es visual, porque nos pone en contacto con el mundo sin la dependencia que se tiene de ayudas ópticas externas o separadas de nosotros. Al quedar integrada en los ojos la corrección, mejora sensiblemente la capacidad visual, y a la vez mejora la autoestima y la seguridad de las personas", afirma la doctora Ivonne Manzur, quien junto con su hermana Falam, se cuentan entre las primeras especialistas que empezaron a desarrollar una técnica quirúrgica que ha evolucionado en forma acelerada.

Se trata de la cirugía refractiva que, con la introducción del rayo láser, ha experimentado toda una revolución en la ciencia médica, y abierto numerosas alternativas de curación para las personas que sufren las incomodidades y limitaciones de los "errores de refracción", o problemas visuales que se tienen cuando hay imperfecciones en el tamaño de nuestros ojos o en la curvatura de las córneas, que provocan que los rayos de luz no se enfoquen en la retina y tengamos vista borrosa.

Los errores que se corrigen con la "queratomileusis in situ", o cirugía Excimer Láser, como se le identifica comúnmente, son miopía, hipermetropía y astigmatismo, ya sea que se presenten en forma separada, o combinadas.

Lo que se hace en estos casos es "esculpir" o "tallar" la superficie de la córnea, cambiando su óptica sin dañar otras estructuras del ojo.

Tiempo para mejorar

La cirugía Excimer Láser se puede aplicar entre los 20 y los 65 años de edad, y...

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