Obras monumentales: Con alma de acero

AutorDeyanira González

La tendencia cultural ha sido esconder el acero en la estructura. Edificios emblemáticos como el Palacio Municipal de Monterrey o el Palacio de Bellas Artes, de la Ciudad de México, esconden el acero bajo piedra o concreto.

De hecho, se puede hablar de dos tendencias en la arquitectura con acero, esconderlo o exponerlo, dice el doctor Armando Flores.

Destaca que otras obras que sí permiten apreciar el acero en su estructura, y que al exponerlo aprovechan aun más sus cualidades, son la planta de Nemak, en Nuevo León, o el Palacio de los Deportes y la Torre Mayor, ambos en la Ciudad de México.

Agrega que en el área industrial existen numerosos ejemplos de esta tendencia, así como en países desarrollados.

Planta de Nemak

El diseño del conjunto de la planta industrial de Nemak, en García, Nuevo León, fue realizado en 1994 por el despacho del arquitecto Carlos Villaseñor, y las dos primeras naves concluyeron su construcción en 1998.

Actualmente existen cuatro domos con una longitud cada uno de 224 metros de largo y un ancho de 84 en la parte central, mientras que en las esquinas el espacio se reduce a 64 metros de ancho.

Destaca que en todo el claro no existe ninguna columna y cada planta cuenta con 18 mil metros cuadrados.

La estructura es de acero, los cilindros que conectan ésta son de aluminio, mientras que en la cubierta se compone de paneles de lámina; existe una viga de borde de perfiles de acero rectangulares, que puede considerarse como otro sistema estructural tridimensional que interactúa con el domo.

"La ingeniería de detalle arrojó en cada nave 100 mil 950 elementos tubulares de acero galvanizado, equivalente a 150 kilómetros de tubo en aproximadamente 11 mil configuraciones diferentes", se informó.

El conjunto ha sido premiado por la Cámara Nacional del Hierro y el Acero (Canacero), en 1998 por el uso innovador del material, y por el Colegio de Arquitectos de Nuevo León, además de recibir también el Premio de Obras Cemex.

Torre de Rectoría de la UANL

En Nuevo León, un ejemplo del uso del acero en la estructura de un edificio, sin buscar ocultarlo, era hasta hace poco la Torre de Rectoría de la Universidad Autónoma de Nuevo León, destaca el experto Armando Flores.

Era un edificio representativo de la tendencia funcionalista internacional, fue diseñado por Luis Rafael Cervantes e inaugurado en 1961.

Los trabajos de remodelación de la torre de 11 pisos y 40 metros de altura iniciaron en agosto del 2000 y consistieron en usar páneles...

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