Ocupa el narco motivos del arte

AutorSilvia Isabel Gámez

El narco irrumpe en la ópera Únicamente la verdad de forma dolorosa. Una ejecución en escena, sin música; sólo el sonido de las balas. El director Mario Espinosa recuerda la salva de aplausos final: "El público sintió una especie de identificación, de reconocimiento de algo que estamos viviendo".

El fmx-Festival de México sorprendió en su inauguración, el 11 de marzo, con una ópera de la compositora Gabriela Ortiz sobre el mito de Camelia la Texana, una leyenda vigente según Alonso Escalante, director de la Compañía Nacional de Ópera del INBA.

"Remite a un tema que está en las noticias de todos los días. Abordarlo es darle la cara, confrontarlo, generar una reflexión y suscitar el debate", señala el funcionario.

El narcotráfico, un tema presente desde hace años en los corridos y la literatura, se extiende a otros espacios del arte. Ocupa la primera plana de los periódicos, y desde ahí se vuelve obra de teatro, pieza coreográfica, e incluso materia de instalaciones.

Una realidad que se impone a los creadores, y que ellos transforman para convertirla en denuncia.

"Está en el aire", dice Espinosa. "Es una asignatura pendiente, y lo que hace el arte es eso, hablar de nuestros problemas".

* * *

En junio de 2007, la artista plástica Rosa María Robles inauguró en el Museo de Arte de Sinaloa Navajas, una serie de piezas e instalaciones hechas con materiales reciclables, de desecho y de uso cotidiano.

"Yo no me planteé crear Navajas, fue surgiendo. Mucha gente en Culiacán tenemos familiares o amigos asesinados por los narcos. Se volvió un tema cotidiano que me llegó a hartar, a asquear, hasta que empecé a crear obras", cuenta Robles.

En la instalación Alfombra roja, una sucesión de cobijas cubría, como una larga alfombra, el piso del museo. Las últimas ocho cobijas, que realmente habían envuelto el cuerpo de ejecutados, fueron decomisadas por la Procuraduría de Justicia estatal como evidencia de crímenes relacionados con el narcotráfico.

"Nunca supimos si las quemaron o las tiraron", dice.

Robles inaugurará el 17 de septiembre Navajas en el Centro de Arte Contemporáneo Wilfredo Lam, en La Habana, y confía en poder reconstruir Alfombra roja para esa fecha.

"Yo traduzco con un lenguaje directo, muy crudo, con instalaciones de objetos, videos y fotografías, la violencia que hay en Sinaloa", explica. "Busco poner el dedo en la llaga. Mi obra es de denuncia, luego viene la reflexión".

En junio de 2009, Teresa Margolles, también artista plástica y culichi, llevó al Pabellón de México en la 53 Bienal de Venecia ¿De qué otra cosa podríamos hablar?, con la curaduría de Cuauhtémoc Medina. Una serie de acciones que incluía una instalación de narcomensajes escritos con hilo de oro sobre telas ensangrentadas colgadas de las paredes del Palazzo Rota Ivancich, piezas de joyería donde las piedras preciosas eran fragmentos de vidrio recogidos en el escenario de crímenes, y la distribución de 10 mil tarjetas para picar cocaína con la fotografía de una persona asesinada por vínculos con el crimen organizado.

"Creo que Margolles dio en el clavo", dice Medina. "Había que decirle a la sociedad y a los gobernantes: ¿de qué otra cosa podemos hablar?".

De los crímenes del narcotráfico, de la violencia y el dolor. Un tema incómodo para el Presidente Felipe Calderón. Y también para su gabinete diplomático, que quería "absurda e ineficazmente" borrar las huellas de lo que pasaba en el País, asegura el curador.

Hubo intentos por frenar la obra, afirma, pero se impuso la decisión del comité de expertos.

El proyecto fue convocado inicialmente por la SRE, la Fundación Jumex, el Conaculta, la UNAM y el Patronato de Arte Contemporáneo. Al final, los dos primeros se retiraron, recuerda Medina.

El tamaulipeco Ricardo Delgado Herbert lleva una década explorando la estética del narco.

"Pienso que un pintor debe ser un cronista de su tiempo. No pinto narcos porque estén de moda".

Por considerarla una apología de los criminales, el Museo de Arte Contemporáneo de Matamoros se negó en 2005 a exponer Glorious Pistols: de la A a la Zeta, una semana antes de la inauguración. Pero lo que hay en sus retratos de narcos, sostiene Delgado Herbert, no es admiración, sino sarcasmo y enojo.

"Son como monstruos de los que me burlo, como si hiciera justicia sin matarlos. En lugar de eso los expongo al público, para que los vean y los juzguen".

Y anuncia desde ahora una serie "apocalíptica": La Pasión según arte huerco, donde los narcos ya no están solos, sino rodeados de familias y militares. Han tomado las calles, como en la vida real.

El narcotráfico puede también adquirir en el teatro texturas épicas. Para Emmanuel Morales, la tragedia de La Orestiada de Esquilo no es muy lejana a las disputas entre cárteles. Es por eso que este director y actor de 28 años imagina a Argos como la Ciudad de México, y a Agamenón como el gran capo.

En la...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR